Según se conoció este lunes, la jueza Marisol Usandizaga condenó a un año y medio de prisión a un matrimonio que se dedicaba a la producción de arándanos en la localidad santafesina de Santa Teresa por emplear a seis chicos de entre 12 y 16 años. Los menores de edad no eran familiares del matrimonio, recolectaban los frutos y les pagaban 11 pesos por kilo mientras que en el mercado se venden a cinco veces más. La denuncia entró a la Justicia en 2016 a través de la Subsecretaría de Políticas de Empleo y Trabajo Decente. Desde la provincia contaron que los chicos serán asistidos por el Ministerio de Desarrollo Social.
Hace más de un año la denuncia entró a la Justicia santafesina y ayer se convirtió la primera condena por aprovechamiento económico ilegal de trabajo infantil de la provincia. Todo empezó durante un operativo de control en una finca de producción de arándanos de Santa Teresa, en el departamento Constitución. “A partir de ahí continuó todo un proceso administrativo con multas económicas, pero también un proceso judicial en el que como ministerio decidimos impulsar la denuncia y estar cerca del fiscal y los jueces”, dijo Guillermo Cherner, subsecretario de Políticas de Empleo y Trabajo Decente.
Según el funcionario es la primera sentencia de este tipo. “Si hay una reincidencia van a tener prisión efectiva. En el trabajo rural es muy común la utilización de menores de edad. Además de una multa muy importante, la posibilidad que la Justicia actúe favorablemente va a servir para prevenir futuros casos”, agregó Cherner.
Necesidad
“Era una situación casi ultrajante porque se les abonaba once pesos el kilo de fruta recolectada, cuando en el mercado después se vendía a casi diez veces más. Son casos de mucha necesidad. Muchas veces estos menores realizan estas tareas porque es necesario para el sustento familiar. Lo primero fue hacer cesar estas tareas. Después acompañar a las familias para ver otras formas de subsistencia”, agregó Cherner.
La provincia se apoyó en la ley nacional 26.847 que define la penalización del trabajo infantil: prisión de 1 a 4 años al que “aprovechare económicamente el trabajo de un niño en violación de las normas nacionales que prohíben el trabajo infantil”. Si bien la ley N° 26.390 ya prohibía el trabajo de menores de 16 años, desde la incorporación de la figura de trabajo infantil en el Código Penal en 2013, hubo nueve denuncias en Santa Fe. Esta fue la primera en que la Justicia condenó.
El trabajo
La denuncia fue parte de del Protocolo para el Abordaje de Casos de Trabajo Infantil de Santa Fe. Trabajan en identificar los casos, atender a las víctimas y coordinar abordajes con el grupo familiar de las víctimas. El gobierno provincial cuenta con 35 Centros de Cuidado Infantil (CCI) que funcionan en 25 localidades. Brindan atención integral para la protección social de niños de 0 a 4 años, como así también conteniendo con trayectorias escolares discontinuas. Ayudan a muchos padres que pueden cumplir sus jornadas de trabajo con la tranquilidad de que sus hijos más pequeños quedan en un lugar seguro, con cuidados acordes a su edad.
La mayoría de los CCI funcionan en el ámbito rural y reciben niños de trabajadores que desarrollan tareas en la producción y cosecha de frutas, verduras y hortalizas, como así también vinculadas a la actividad pesquera y a la producción tambera. Durante la época de cosecha cada centro funciona en horarios que respondan a las necesidades de las familias. Los que están en las ciudades contienen a hijos de familias que trabajan en la construcción, recolección informal y casas particulares.
Lo permitido
El Ministerio de Trabajo da autorizaciones para que adolescentes de 16 y 17 años en casos excepcionales puedan trabajar. Se otorgan para preservar la salud física y psíquica de los niños y su permanencia en el sistema educativo obligatorio. Teniendo en cuenta el listado de tareas peligrosas diseñado por la provincia, no pueden ser de más de seis horas diarias o 36 semanales. Para adolescentes de entre 16 y 18 años puede ser extendida a ocho horas diarias o 48 semanales. En una empresa familiar los menores entre 14 y 16 años podrán ser ocupados en empresas de familia siempre que la jornada de trabajo no supere las tres horas diarias y las 15 semanales. Para el trabajo artístico la provincia debe hacer evaluaciones previas de condiciones.