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Ex jefes de la desaparecida Secretaría de Delitos Complejos a un paso del juicio

Se trata de los funcionarios que cumplieron los cargos máximos en la repartición. Están acusados de falso testimonio. Durante sus declaraciones desconocieron la tarea de un subalterno que terminó acusado por asociación ilícita en la causa Monos. Finalmente fue absuelto

Este lunes finalmente tuvo lugar la audiencia preliminar contra Andrés Ferrato y Ana Viglione, ex integrantes de la disuelta Secretaría de Delitos Complejos de la provincia. Es por el delito de falso testimonio agravado. Los acusan de mentir en el marco de la causa Los Monos, situación que perjudicó al policía Gustavo “Gula” Pereyra.  El fiscal Aníbal Vescovo, dijo que los dichos de Ferrato y Viglione fueron tomados por el camarista Daniel Acosta como fundamento para revocar el sobreseimiento que había logrado la defensa de Pereyra, quien finalmente fue absuelto en juicio oral.

Para el fiscal, Andrés Ferrato y Ana Viglione afirmaron falsedades y negaron verdades en sus declaraciones que perjudicaron a Pereyra. Vescovo llevará a juicio a ambos por el delito de falso testimonio agravado y pidió 3 años de prisión por el delito. La defensa hizo un planteo formal sobre la querella y la audiencia pasó a un cuarto intermedio.

Gustavo “Gula” Pereyra era un comisario inspector que estaba al frente de la brigada policial que hacía las investigaciones de calle de la Secretaría de Delitos Complejos. Según definieron algunos de sus integrantes, Pereyra informaba sobre los resultados de las pesquisas que llevaba adelante en forma verbal a su superior Andrés Ferrato que a su vez le comunicaba a la mandamás de la Secretaría Ana Viglione. De las declaraciones surgió que en una oportunidad la mujer estuvo en una reunión con Pereyra. A lo que el policía sumó que enviaba mails a sus superiores con la data que recogía.

Pero Pereyra quedó bajo la lupa después que uno de los integrantes de la brigada quedara involucrado en la causa Los Monos. Se trató de Juan Chavo Maciel quien aceptó un procedimiento abreviado en la causa y fue condenado. A Pereyra lo imputaron y citaron a declarar como testigos a sus superiores Ferrato y Viglione. Estos dijeron que la orden que impartida era investigar sobre delitos organizados que no incluyeran trata de personas ni estupefacientes y dejaron a su subalterno en una posición muy incómoda ya que en su computadora se secuestró información sobre ubicación de bunkers y datos vinculados al tráfico de drogas.

Vescovo explicó que esas declaraciones fueron tomadas por el camarista Daniel Acosta para revocar el sobreseimiento que había conseguido la defensa de Pereyra y el policía llegó a juicio como integrante de una asociación ilícita mixta. Pero una pericia informática logró recuperar una serie de mails que Pereyra les mandaba a sus superiores con información vinculada a investigaciones por narcotráfico.

Pereyra declaró en varias oportunidades. Durante el juicio oral dijo que Viglione le pasó distintos trabajos vinculados con drogas cuando aún estaba solo en la brigada. Aseguró que le dieron distintas investigaciones y crearon un mail grupal para comunicarse con sus superiores dónde le pasaba la información. Vescovo explicó que al declarar Viglione y Ferrato dijeron falsedades o negaron verdades  y pidió 3 años de prisión por el delito de falso testimonio.

En la sala además estaba el abogado querellante, Sergio Larrubia quien no tuvo oportunidad de hablar ya que las defensas – Daniel Terani por Viglione y la defensora oficial Alejandra Paolini por Ferrato – se quejaron de una formalidad vinculada al poder del profesional  que respalda la querella por lo que el juez Juan Andrés Donnola dispuso un cuarto intermedio para que presenten por escrito la pretensión y así reanudar la audiencia.

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