El Servicio Público Provincial de Defensa Penal (SPPDP) presentó un habeas corpus colectivo para los dos internos rosarinos del pabellón 6 sur de la Unidad Penal 1 de Coronda luego de que este viernes subieran un video al sitio YouTube para denunciar que estaban encerrados en sus celdas desde el domingo con irregularidades en la provisión de comida y agua donde sumaron la descripción de una serie de irregularidades por parte de «policías» y el personal del Servicio Penitenciario, por lo que pidieron ser trasladados a la cárcel de Piñero. Además, el Servicio de la Defensa dio intervención al Registro Provincial de Violencia Institucional y Afectaciones a los Derechos Humanos, organismo que está bajo órbita. Ayer, el Ministerio de Seguridad consideró el reclamo como extorsivo y dispuso sanciones disciplinarias para la dupla, ya que el celular es un elemento prohibido en los penales.
«En cumplimiento de su misión institucional, y para velar por las debidas condiciones de privación de libertad e investigar posibles violaciones de los derechos humanos, la Defensa Pública ha interpuesto sendos hábeas corpus por la causal de agravamiento ilegítimo de las condiciones de detención, algunos en beneficio de internos con afectaciones particulares, y otros en relación a falencias sistémicas del Servicio Penitenciario», explica el comunicado emitido por el SPPDP.
Para la institución, las denuncias que efectuaran los dos internos y que fueron difundidas este viernes por los medios de comunicación requirieron “la presentación ante la Justicia de un Hábeas Corpus Colectivo por agravamiento de las condiciones de detención”.
En el video que circuló ayer y luego de presentarse como Lucas Benitez y Martín Cardozo, los internos describieron: “Desde el domingo que venimos curtiendo engome (en referencia a estar cerrados en sus celdas sin acceso al pabellón). La policía no nos pasa la comida y si te la dan te ponen pimienta. No nos pasa agua para higienizarnos, no tenemos agua para tirar al baño. No tenemos nada. ¿Me entienden? No tiene que ser así porque nos tienen como animales. Cometimos un delito y lo estamos pagando”, indicaron y también contaron que otros internos de ese pabellón estaban en la misma situación y se quejaron de la rotura de sus elementos personales cada vez que los requisaban.
Con respecto, a este tema el Ministerio de Seguridad a través de Lucía Masneri, directora de Relaciones Institucionales del Servicio Penitenciario de Santa Fe, respondió ayer a diferentes medios de comunicación que no eran los canales para hacer estos reclamos y negó la situación que manifestaron por los presos en el video, el cual fue subido a YouTube y luego bajado.
En otro tramo de la filmación que dura casi 4 minutos, los reclusos hicieron hincapié sobre el por qué tenían un teléfono celular, situación que les valió una sanción disciplinaria por parte del Servicio Penitenciario por ser un elemento prohibido. «Los mismos policías te lo habilitan. Por 3 mil o 4 mil pesos te venden el teléfono, drogas, pastillas, merca. Por eso después la gente pregunta cómo es que tenemos teléfonos», dijeron.
Las conductas del personal carcelario que manifestaron los reclusos no pasaron desapercibidas por el organismo de la Defensa Pública, el cual puntualizó que «los hechos denunciados merecen una adecuada investigación toda vez que invocan la comisión de graves conductas por parte de los funcionarios del Servicio Penitenciario».
Por último, en el escrito se informó que dio intervención al Registro Provincial de Violencia Institucional y Afectaciones a los Derechos Humanos, creado en el ámbito de la Defensoría Provincial.
