Los fenómenos astronómicos fascinan al ser humano desde tiempos inmemoriales. El eclipse total de luna, o la llamada luna de sangre, en la madrugada de este 21 de enero, no fue la excepción. Miles de rosarinos trasnocharon para ver las distintas fases del evento astronómico. En el Parque Urquiza, unas 2 mil personas dieron cita en el Planetario Municipal hasta la salida del sol para tener una vista privilegiada a través del telescopio. Y muchísimos más disfrutaron en las terrazas de casas y edificios charlando entre vecinos y aprovechando para despuntar el vicio de la fotografía, ya sea con cámaras profesionales o simplemente al paso con celular.
La luna se tiñó de rojo y, pese a la ansiedad que provocaron los nubarrones que bloqueaban el fenómeno por momentos, el eclipse pudo disfrutarse en Rosario. Susana Inés Dezorzi, directora del Complejo Astronómico Municipal, dijo que fue una noche “espectacular, ejemplar desde el punto de vista de la convivencia. Es un tema que genera muchísimo interés”.
“El cielo nos dio un susto, porque quiso empezar a cubrirse de nubes, pero finalmente se despejó. La luna de sangre se pudo ver claramente”, detalló la funcionaria a cargo del complejo municipal que desde las 0.30 recibió una larga fila de curiosos por el lente y el fenómeno que afectó al satélite de la Tierra.
Dezorzi contó que desde la noche del domingo hasta entrado el amanecer, llegaron al Parque Urquiza aficionados con telescopios, familias con reposeras, y que los técnicos del Planetario “contuvieron” a más de 2 mil personas que hicieron fila para ver el fenómeno astronómico.
“Hay un cambio en la percepción social de la ciencia astronómica, son temas que generan muchísimo interés. Es un fenómeno muy notable”, describió la funcionaria.