En el marco del Plan Integral de Piscicultura, la provincia avanza en la reproducción de pacú con el objetivo de obtener juveniles adaptados. En esta temporada, que comprende todo el mes de enero, se realizaron reproducciones en Ángel Gallardo, Rosario y San Javier, con la coordinación del equipo técnico del Ministerio de Producción.
“La reproducción es fundamental para avanzar en el desarrollo de la actividad, ya que es crucial obtener juveniles de producción propia para evitar altos costos y riesgos de traslado. Estas experiencias pretenden generar información y capacitar a los emprendedores que están iniciando la actividad”, destacó el secretario de Ganadería, Lechería y Recursos Naturales de la provincia, Roberto Tión
“La propuesta de la piscicultura tiene el objetivo de generar una actividad económica con un alto impacto social, ya que se busca involucrar a pescadores, emprendedores y empresas agropecuarias; pero también un impacto ambiental, porque a medida que se desarrolla vamos a tener menor presión sobre la fauna íctica de los ríos”, agregó el funcionario. De hecho, el pacú desapareció por completo en estado silvestre de la cuenca del Paraná en el sur de la provincia, y hay registros fotográficos históricos de Rosario donde aparece como una pieza de los pescadores del siglo XIX y principios del XX.
Ahora forma parte de un plan de desarrollo en cautiverio. Santa Fe cuenta ya con unos 30 emprendimientos productivos que trabajan a manera de ensayos para la generación de información, es decir, de investigación adaptativa, a partir de experiencias en jaulas flotantes sobre el río, en estanques y en baletones (cursos de agua artificiales) de riego de arroceras.
Sobre los distintos métodos, el equipo técnico del Ministerio de la Producción registra parámetros del agua, ganancia de peso, consumo de alimento, entre otros indicadores. Para ello trabaja con emprendedores que, en muchos casos, son pescadores que transitan entre una actividad de recolección a una de siembra, cría y cosecha.
Los centros que están involucrados tienen trayectorias diferentes. En Ángel Gallardo, a fines de 2018 y principios de 2019 se puso en funcionamiento el Laboratorio de Reproducción Piscícola en el Centro Operativo Experimental. Fue diseñado para realizar una actividad que sea independiente en recursos, como el requerimiento de agua con características de calidad propicias: en el lugar también se exploran diferentes sistemas de cultivos agroecológicos y convencionales que aprovechan el mismo caudal.
En tanto, en Rosario, en el Acuario Río Paraná se realizan reproducciones con la finalidad de obtener, a través del mejoramiento genético de diferentes poblaciones, líneas de pacú que tengan características beneficiosas para su producción en la provincia, como resistencia a bajas temperaturas. “Esto permitirá en unos años, mejorar la calidad de la semilla (juveniles), siendo éste el principal insumo para el desarrollo de la actividad en la provincia”, destacaron desde la cartera productiva.
Finalmente, en San Javier se encuentra la Granja Piscícola, donde se llevaron adelante tres reproducciones durante los últimos días de diciembre y los primeros de enero. Para las mismas se utilizó un protocolo con una hormona sintética desarrollada entre personal técnico del Ministerio de la Producción y del Centro Nacional de Desarrollo Acuícola (Cenadac), y se obtuvieron unas 50.000 larvas, lo que fue catalogado como un “resultado alentador”.
“En estas experiencias se evaluará, a su vez, el efecto de la técnica sobre el desove y la maduración final de los óvulos de hembras maduras, como también sobre la viabilidad de los embriones”, explicaron.