Dos hombres, oriundos de la provincia de Buenos Aires, fueron imputados este viernes por participar en un robo a la sucursal del banco Galicia de barrio Tiro Suizo, cuyo botín supero el millón setecientos mil pesos. Los sospechosos habían sido detenidos el miércoles pasado y fueron trasladados a Rosario, donde continuarán detenidos tras ser acusados como quienes hicieron la inteligencia previa al asalto. Para la fiscal de la Unidad de Investigación y Juicio, Cecilia Brindisi, forman parte de una banda organizada, con los roles bien definidos que llegó a Rosario armada para delinquir. El hecho se produjo el 12 de octubre pasado en una sucursal de la zona sur. Tres hombres entraron a la entidad se hicieron pasar por clientes y arremetieron contra los empleados, custodios y clientes que había en el lugar para alzarse con un botín millonario. El juez aceptó la imputación para la dupla por el delito de robo doblemente calificado y los dejó presos sin plazo. Aún resta dar con los atracadores que ingresaron a la entidad bancaria.
El 12 de octubre, la sucursal del banco Galicia de San Martín al 5500 fue blanco de una entradera bancaria. Tres hombres ingresaron a la entidad haciéndose pasar por clientes.Uno de ellos se quedó en el hall de ingreso y otro fue directo a las cajas. El tercero se dedicó al gerente y la tesorera, a quienes obligó a abrir el tesoro. Amenazaron a todos con armas de fuego y se alzaron con 1.116.867 pesos, 14 mil dólares y 300 euros.
Salieron del banco con bolsas negras dónde cargaron el dinero y se subieron a una Renault Sandero gris cuyo conductor aceleró por calle Laprida. Un llamado al 911 contó que en Bonpland y Buenos Aires (a unas 15 cuadras del lugar del atraco) un auto dobló bruscamente y casi lo choca, por lo que debió frenar. El Sandero venía con las balizas encendidas y no tenía matrícula trasera. También contó que al Sandero lo seguía de cerca un Peugeot 308 y dijo que pudo tomar la patente. El testigo contó que dos ocupantes bajaron y abandonaron la Sandero para luego subirse al 308 con bolsas negras y se fueron.
Hubo otros dos llamados a la central policial: uno relatando el asalto al banco y el otro informando que en un domicilio de barrio Tiro Suizo hubo una entradera, después se determinó que este último llamado fue para despistar, explicó la fiscal en la audiencia imputativa.
Pistas
El día del asalto, los pesquisas secuestraron la Sandero. En el interior encontraron dos tickets de peaje de General Lagos y Zarate y revisaron las imágenes captadas por las cámaras de seguridad en ese paso. El vehículo contaba con un pedido de secuestro activo y las matricula no coincidía con los guarismos del auto, describió Brindisi.
También siguieron la pista de la patente del 308 que dio el denunciante al 911. Determinaron que el auto pertenecía a una mujer y contaba con varias autorizaciones de manejo entre ellas: a Diego Leonel V., de 30 años y uno de los detenidos el miércoles pasado. Los detectives ubicaron su domicilio en la localidad de Libertad, en Merlo, Buenos Aires e intervinieron los teléfonos de las personas que tenía autorización de manejo. El padre de Diego V. habló de las sospechas que tenía sobre su hijo en la participación del atraco.
Revisaron las cámaras de seguridad del 911 que leen las patentes de los autos y determinaron que el día del asalto, tres autos entraron a Rosario: una Renault Sandero, un Peugeot 308 y un Volkswagen Bora negro. Los dos últimos estuvieron dos días antes en cercanías del banco haciendo tareas de inteligencia. En una ampliación de las secuencias captadas el día del atraco y el 308 era conducido por un hombre cuyas características físicas coincidían con las de Diego V., explicó la fiscal. En esa oportunidad, lo acompañaban otros dos hombres que las cámaras del banco los tomaron como los atracadores.
Para Brindisi, el dueño del Bora era Humberto Cristian M., de 44 años, el otro apresado. A este hombre la fiscal le achacó una participación en tareas preparatorias y ser la persona que llamó al 911 intentando despistar a la Policía con una entradera en una casa del barrio dónde está el banco. Según personal del 911, la voz de ambos coincidirían, aún resta la pericia de voz.
Las detenciones
Este miércoles se realizaron allanamientos en Buenos Aires. A Diego V. se lo detuvo en su casa de la localidad de Libertad, allí se secuestró un pistola calibre 9 milímetros con la numeración limada y la leyenda Policía Federal Argentina, la encontraron en su dormitorio, dijo la fiscal. Para Brindisi esta arma es similar a la que describieron los testigos del robo. Mientras que a Humberto M. lo atraparon en la localidad de Guernica. Allí el hombre tiene un parripollo, en el local se encontró documentación de un Volkswagen Bora a su nombre.
En la audiencia imputativa, el defensor Claudio Puccinelli por Humberto M. y el penalista Carlos Varela por Diego V., cuestionaron la evidencia. Varela pidió que no se le impute a su cliente la tenencia de arma de guerra porque se secuestró en otra jurisdicción. El juez Juan Carlos Curto accedió y dispuso dar intervención al magistrado que corresponda. Finalmente, y a pedido de la fiscal, el magistrado admitió la imputación para la dupla por el delito de robo doblemente calificado por cometerse en banda y con armas de fuego y le dictó la prisión preventiva sin plazo. Aún permanecen prófugos, los tres hombres que ingresaron al banco.