El Tribunal Oral Federal de Santa Fe condenó este viernes a seis ex policías provinciales y a un ex miembro del Ejército –integrantes de la denominada “Patota santafesina”– a penas de entre 4 y 20 años de prisión por crímenes de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura cívico-militar. Se trata de privaciones ilegales de la libertad, tormentos y distintos hechos de violencia sexual que tuvieron lugar entre 1976 y 1977. La lectura de los fundamentos será el 31 de mayo.
El fallo fue dictado por los magistrados María Ivon Vella, José María Escobar Cello y Luciano Homero Lauría, del TOF de Santa Fe. Durante el juicio, que se llevó adelante en la capital provincial, se ventilaron delitos que tuvieron como víctimas a diez personas. La causa se inició a partir de la remisión de declaraciones testimoniales vertidas durante el juicio en el que fue condenado, entre otros, el ex juez Víctor Brusa.
Los hechos ocurrieron entre 1976 y 1977. Las víctimas estuvieron detenidas en centros clandestinos que funcionaban en dependencias de la Policía provincial, como las comisarías 1ª y 4ª, y la Guardia de Infantería Reforzada. Según expresó en su alegato el fiscal general Martín Suárez Faisal, allí “se realizaban torturas, interrogatorios, simulacros de fusilamiento, abusos de todo tipo y muchas otras crueldades”. Este viernes, seis hombres y una mujer fueron condenados por los delitos de privación ilegal de la libertad, tormentos, violación sexual agravada y violación.
La pena más alta, de 20 años, fue para Eduardo Alberto Ramos Campagnolo, que era oficial ayudante en el Departamento de Informaciones (D-2) de la Policía de Santa Fe. La Fiscalía había solicitado 23 años de prisión por los delitos de privación ilegal de la libertad agravada, tormentos agravados, violación sexual agravada y abuso deshonesto y violación de domicilio por allanamiento ilegal. Al unificar la pena con otras tres condenas, el TOF de Santa Fe le impuso la pena única de prisión perpetua.
Sobre Héctor Melitón Martínez, integrante del Destacamento de Inteligencia 122 del Ejército Argentino recayó una pena de 12 años; Ricardo Ferreyra, subjefe de la comisaría 1ª de la Policía de Santa Fe y luego jefe de la comisaría 4ª, fue condenado a 15 años; María Eva Aebi, ex agente de la Brigada Femenina de la Unidad Regional I, a 7 años; Eduardo José Córdoba, ex agente de la Guardia de Infantería Reforzada, a 4 años; Juan Calixto Perizzotti, ex coordinador del Área de Defensa 212 y jefe de la Guardia de Infantería Reforzada –uno de los mayores centros clandestinos de detención de la región– a 10 años, y Víctor Hugo Cabrera, ex agente de la Brigada de Investigaciones de la Policía de Santa Fe, a 6 años.