La alianza Cambiemos, o más atrás si hablamos del PRO, venía creciendo elección a elección en la ciudad, hasta que encontró un freno en este 2019. La situación nacional de crisis y recesión, producto de la gestión de Mauricio Macri, le quitó posibilidades al espacio que triunfó en Rosario en 2017. Consciente de esos obstáculos, Daniela León, primera candidata a concejal de Cambiemos expresó: “Sin ninguna duda la situación económica tiene algún peso en la elección. No hay que tenerle miedo a la adversidad, caminamos por la calle y la gente nos pide que no aflojemos. Estamos seguros de que gran parte de los rosarinos nos van a acompañar”.
La dirigente radical, de largo recorrido dentro del Palacio Vasallo donde incluso llegó a ser presidenta del cuerpo, expresó ante El Ciudadano: “Abracé la política desde muy joven y me plantearon la necesidad de que vuelva a ser candidata a concejal, no era mi idea volver pero la verdad es que me preocupa cómo está la ciudad”
“Veo una involución de la ciudad, un déficit muy grande en materia de servicios e infraestructura, sobre todo en los barrios. Es lo que venimos planteando hace años: cuando el Estado se retira del territorio, se instala el delito y se consolida. Eso es lo que ha ocurrido en Rosario. Aquella gran decisión en su momento que fue la descentralización municipal, que todos acompañamos, hoy se ha transformado en una descentralización meramente administrativa, los vecinos no se sienten acompañados por el municipio, cada vez que tienen un problema tienen que ir ellos al centro de distrito a hacer un reclamo, pagar primero un sellado para reclamar un servicio que el municipio tiene la obligación de brindar”, detalló.
“No hay iluminación, el transporte no entra después de las 8 de la noche por la inseguridad, los centros de salud cierran a las 2 de la tarde, colapsan los hospitales, colapsan los turnos, no hay pavimento. No hay obras que son vitales para cubrir las necesidades básicas como agua potable, alumbrado, cloacas. La verdad es que es una situación dolorosa que Rosario, siendo la segunda ciudad de la Argentina y la cabecera de la región económica, esté con estas deudas. Lo duro es que hoy Rosario en sus barrios es caldo de cultivo para que el narcotráfico pueda operar. Hoy en Rosario hay bandas, hay mafias y hay narcotráfico. La cadena de blanqueo para el lavado de dinero está funcionando. Hay mucha deserción escolar, chicos que de la escuela van a la calle y de la calle a la droga. La verdad es que no podemos seguir viviendo de esta manera”, expresó León.
—En la recorrida por los barrios que realiza, ¿ve que los reclamos de los vecinos cambiaron?
—Hay un reclamo por la inseguridad desde hace muchos años. En 2016 declaramos la Emergencia de Seguridad, sancionamos una ordenanza con 28 herramientas que nos había pedido la intendenta. Y cuando declarás eso es porque Rosario ya venía con 5 o 6 años de una inseguridad incipiente, con casos que se han hecho público y que han consternado a la ciudadanía. Hay un problema cultural en Rosario, ya hay generación chicos que nacen en la narcocriminalidad cuyo reconocimiento social pasa por portar un arma, por el dinero de la venta de droga, el dinero de las mafias y si nosotros no abordamos esa ruptura del tejido social, esa subcultura que está conviviendo en Rosario, vamos a tener una sociedad peor que la que tenemos hoy. Por eso es urgente empezar, esta es una deuda real de quienes gobiernan hoy Rosario porque la inseguridad tiene el origen en el narcotráfico. No hay otro origen. Y viene de 10 años a esta parte, no es nuevo. Honestamente cuando se habla de narcotráfico en esta ciudad, el Frente Progresista señala al gobierno nacional y provincial como los responsables de la situación pero se olvidan que la prevención la tienen que hacer las ciudades. Si la municipalidad iluminara, garantizara el transporte público, que entren las ambulancia, que los centros de salud cierren a las 12 de la noche, los barrios estarían poblados y el territorio estaría ocupado por los buenos y no por los malos como ocurre hoy. Ningún bunker se instala en una cuadra iluminada, con transporte y con la gente en la calle.
—Este escenarios que planteás ocurría cuando vos participabas también del Frente Progresista, ¿estas críticas las hacías puertas adentro?
—Sí, sin ninguna duda fue la bisagra de muchos radicales. Yo no fui la única, por algo me señalan a mí nada más. José Corral, nuestro candidato a gobernador, es intendente de la ciudad de Santa Fe y también fue parte del Frente Progresista. La UCR en Santa Fe fue la creadora del Frente Progresista, en una alianza electoral con el socialismo y otros partidos menores para ganarle al peronismo en su momento. Pero la realidad es que hoy hay un frente nacional que se llama Cambiemos, la UCR forma parte de ese frente. Yo fui parte del Frente Progresista y defendí siempre con convicción todas aquellas propuestas y herramientas que la Intendencia enviaba al Concejo para mejorar la calidad de vida de la gente. Soy una persona que trabajó para la gobernabilidad porque soy una convencida de que no hay que poner palos en la rueda y no lo voy a ser cuando sea concejala nuevamente. Pero sus políticas tienen que ver con abandonar el territorio, con no cuidar a los rosarinos, con retirarse de los barrios, con no controlar la deserción escolar, con no generar una instancia de contención para los jóvenes. Políticas que nunca existieron para poder amortiguar el impacto de esta crisis económica porque no hay promoción para la industria, no hay programas para la generación de empleo, Rosario expulsa a sus industriales porque no hay un parque industrial público. No hay talleres de capacitación en oficios para trabajos del futuro con los jóvenes que hoy están en la calle. No hay una red de contención en los barrios a través de las escuelas que a mi juicio tienen que quedar abiertas después de las 5 de la tarde. El narcotráfico es eso, es todo lo que va pasando en Rosario y se va haciendo cargo, hay lugares donde ya ofrecen salud, como en el barrio Las Flores. Va ocupando los lugares que deja el Estado.
La necesidad de un “cogobierno real”
Daniela León es convencional radical, por lo que participó del encuentro partidario en Parque Norte que ratificó el rumbo de la UCR en Cambiemos. Coincidió con la continuidad en la alianza y pidió por un “cogobierno real” con el PRO, el partido que lidera Mauricio Macri.
“El radicalismo ratificó Cambiemos porque es un frente nuevo y porque fue uno de los fundadores hace 4 años. Obviamente no desconoce la situación difícil que estamos viviendo todos los argentinos pero en el seno de la Convención Nacional precisamente se discutieron estas cuestiones. Se habló de todo lo hecho y se habló de la deuda más grande que es la economía interna”.
En referencia a las propuestas de ampliar la base de sustentación de Cambiemos, respondió: “Es un frente y hay coincidencias con el proyecto y con el rumbo que tomó la Argentina, bienvenida sean todas las fuerzas políticas que quieren sumarse”.
—¿Tendría que tener más participación la UCR, definir el candidato a vicepresidente?
—Sin ninguna duda. Seguramente se va a plantear un cogobierno real. Nosotros queremos que el vice sea de la UCR y eso surgió de la Convención también. Vamos a enfrentar una elección que va a ser muy difícil y seguramente ahí va a estar la UCR ocupando los lugares que le corresponden.
