El grupo chileno Falabella profundiza su proceso de achique en la Argentina con el despido de hasta el 4% del personal que emplea en el país junto a su controlada Sodimac.
Es decir, 200 trabajadores que dejaron o están en vías de dejar de pertenecer a esta cadena de tiendas departamentales y de artículos para la construcción a partir de renuncias y desvinculaciones consensuadas.
A principios de este año, la cadena había cerrado uno de sus locales insignia como lo fue el ubicado en la porteña peatonal Florida pero en esta nueva etapa de su plan de reestructuración no se contempla un escenario similar.
Según le dijeron a IProfesional fuentes cercanas al grupo, la decisión tiene que ver con la necesidad de reencauzar sus operaciones en el mercado doméstico, afectada por la crisis financiera y la fuerte caída del consumo.
De hecho, la compañía lleva 18 meses consecutivos de caída de sus ventas en dos dígitos en el mercado argentino.
Si bien no está clara la distribución de los despidos entre ambas compañías, en Falabella habría alcanzado a los 120 trabajadores de varias de sus líneas de negocios, incluyendo también a gerentes y subgerentes de algunas de sus sucursales. El resto sería personal contratado en Sodimac.
Hasta el momento, los números de Falabella-Sodimac en el mercado local son negativos. De hecho, en el primer trimestre sus ventas cayeron algo más de un 35% y le provocó al holding una baja en su facturación global de u$s101 millones solamente en esos primeros tres meses del año.