Días antes de una nueva visita a la Argentina, que incluye conciertos en Buenos Aires, este miércoles en el City Center de Rosario y en Mendoza, el cantautor estadounidense Richard Marx reivindicó su labor como compositor, al aceptar que le resulta “increíblemente divertido” actuar para el público, aunque “si por alguna razón tuviera que abandonar los escenarios, nunca dejaría de escribir canciones”.
“Amo ambas cosas. Tocar es increíblemente divertido. Amo estar en diferentes partes del mundo, la experiencia de conocer gente, ver que en lugares en donde no se habla inglés cantan mis canciones», subrayó en una entrevista con Télam.
«Pero también amo escribir nuevas canciones. Me resulta excitante. Si por alguna razón tuviera que abandonar los escenarios, nunca dejaría de escribir canciones”, agregó el artista, cuyas composiciones fueron interpretadas por Paulina Rubio, NSYNC y Josh Groban, entre otros.
A poco más de un año de su primer show en la Argentina, Marx regresa con “A night full of hits”, con el que se pasó por el teatro Arena Maipú de la ciudad de Mendoza, al día siguiente en el porteño Teatro Ópera, y este miércoles en el City Center de Rosario.
Famoso por su hit “Right here waiting”, el cantautor tuvo su primera gran oportunidad hace más de tres décadas cuando fue convocado por Lionel Ritchie como corista para su recordado disco “Can’t slow down”, el que contenía los éxitos “All night long” y “Hello”.
Desde entonces, el músico nacido en Chicago acumula más de 30 millones de discos vendidos en todo el mundo, varios premios Grammy y 14 canciones en el primer puesto de los rankings, además de contar con el récord de ser el único artista masculino que ocupó el Top 5 en los charts Billboard con sus siete primeros singles.
Desde su casa en Los Ángeles, Richard Marx conversó con Télam sobre sus shows en la Argentina, reflexionó sobre su carrera y recordó especialmente a Lionel Ritchie y al fallecido cantante Luther Vandross, quien puso su voz a la laureada canción “Dance with my father”.
“Muchos me preguntan por qué vuelvo tan pronto y yo digo que no es suficientemente pronto. El show del año pasado fue increíble, vino mucha gente; y ahora me enteré que hay una gran demanda de la gente para que vuelva, así que estuve esperando mucho y este es el momento perfecto”, puntualizó Marx, quien anticipará en estos conciertos algunas canciones del nuevo disco que editará en noviembre.
Sobre sus éxitos, Marx destacó sobre su anterior visita al país (el año pasado): “Toda la gente se paró, bailó y coreó cuando canté «Endless summer night» o «Should’ve known better». Conocían cada palabra de las canciones, así que no creo que «Right here waiting» sea mi única canción conocida. Pero sí me siento un afortunado de haber escrito una canción tan conocida en todo el mundo, que incluso hoy, 30 años después, se sigue cantando. Soy muy feliz por eso y por el hecho de que la canción haya trascendido varias generaciones y hoy haya muchos chicos jóvenes, que ni habían nacido cuando la canción se publicó, que la conocen y la cantan”.
Asimismo, sobre los temas que lo inspiran, el cantante mencionó: “La mayoría del tiempo me inspiran mis experiencias personales, las relaciones o historias que escucho de otras personas, cosas que le pasan a mis amigos. La mayoría de mis canciones no son de amor, sino acerca de emociones, las relaciones, lo bueno y lo malo del amor. Cuando escribí «Angelia», que es una historia de ficción, necesitaba ponerle un nombre y lo tomé de una azafata, pero no se trata de algo particular que me haya pasado en un vuelo, pero son sentimientos comunes que muchos comparten”.
“Las estructuras de las canciones son las mismas pero la música va cambiando porque uno va escuchando otras cosas, sino estaría siempre atrapado en lo mismo. Escucho mucha música, vivo en Los Ángeles, que es una ciudad en la que uno pasa mucho tiempo arriba de un auto, y estoy siempre con la radio prendida. Escucho de todo. Me gustan las cosas nuevas, las cosas que amaba de chico como Billy Joel y The Eagles, la música latina como la bossa nova. Cuando aparece algo que me conmueve, lo incorporo”, agregó.
Por su parte, recordó sus inicios junto a Lionel Ritchie y Luther Vandross: “Aprendí mucho de Lionel porque era muy joven, tenía 18 o 19 años. Aprendí de producción, cómo escribir un tema, como montar un show. Fue algo muy inspirador para mi educación. Con Luther fuimos amigos antes de escribir juntos. Nos reíamos mucho porque era una persona muy divertida. Pasamos momentos increíbles y estoy muy orgulloso de nuestro trabajo conjunto. Era una muy buena combinación cuando estábamos juntos”.