El último de los nueve evadidos que protagonizaron el 8 de mayo pasado la fuga de película cuando eran trasladados en un minibús del Servicio Penitenciario por la autopista Rosario-Santa Fe, fue recapturado este martes por la tarde cuando se trasladaba en un auto Chevrolet Corsa por inmediaciones de Uriburu y Vuelta de Obligado, de la zona sudoeste. Se trata de Hugo Peralta, de 32 años. Por este hecho, los ocho reclusos que ya habían sido apresados fueron imputados por la evasión y robo, mientras que diez agentes del Servicio Penitenciario quedaron acusados por el facilitamiento de la fuga.
Según voceros policiales y judiciales, el personal de la Brigada Operativa de la Unidad Regional II consiguió el dato de que Peralta, el hombre de 39 años nacido en la provincia de Chaco y residente en Rosario –condenado a 20 años y 2 meses de prisión por los delitos de amenazas calificadas, robo simple y robo calificado por el uso de arma de fuego–, se refugiaba en una vivienda de Lamadrid al 1800, de la zona sudoeste.
En ese marco, las fuentes explicaron que alrededor del mediodía los investigadores montaron vigilancia en la zona y a las 17 advirtieron que el prófugo salió de una vivienda de la cuadra Lamadrid al 1800 y se subió a un Chevrolet Corsa. Los uniformados dejaron que Peralta conduzca unas 11 cuadras hasta inmediaciones de Uriburu al 1900, donde hicieron que detenga la marcha y lo arrestaron.
De película
La fiscal Karina Bartocci, a cargo de la investigación, explicó que la evasión se produjo el 8 de mayo pasado al mediodía en el kilómetro 2 y 5 de la autopista Rosario-Santa Fe, a la altura de Granadero Baigorria. Ese día un minubus del Servicio Penitenciario había traído a la ciudad a 13 reclusos alojados en la cárcel de Coronda para que realizaran una visita a familiar en la Unidad Penal 3, de Zeballos y Riccheri. Cuando volvían «uno de ellos prendió un cigarrillo, lo que provocó que un agente policial abriera la puerta del compartimiento».
Según la fiscal, en ese momento «se abalanzaron hacia la parte delantera del vehículo, sustrayéndole a los empleados del Servicio Penitenciario sus armas de fuego».
Luego nueve escaparon y «sustrajeron un automóvil estacionado en la vía pública sin ocupantes y con la llave de arranque colocada» en Baigorria.
En ese marco, la fiscal imputó a los ocho recapturados hasta el momento por la evasión y el robo de las armas y del auto. En tanto, diez agentes fueron acusados por «facilitamiento de evasión».
Recapturados
El mismo día del escape, tres reclusos fueron recapturados: Nahuel Arce, de 26 años, quién tenía una condena hasta el 29 de septiembre de 2022 por un homicidio dictada en 2014. Diego Alfonso, de 25 años, fue recapturado. Se encontraba alojado en el Servicio Penitenciario desde el 28 de junio de 2013 por una causa de robo calificado cuya condena vencía el 28 de diciembre de este año.
Y por último, Alberto Quiroz, de 42 años. Se supo que el mismo se encontraba alojado en la órbita del Servicio Penitenciario desde el 03 de junio de 2014 con una condena que vencía el 3 de febrero de 2028 por una causa de homicidio en ocasión de robo agravado por uso de arma de fuego”.
Al día siguiente, el personal policial apresó en una casa de Valparaíso al 2700 a Alberto Quiróz, de 42 y condenado a 13 años y 8 meses de cárcel por el asesinato del taxista Hugo Camilo, ocurrido en enero de 2015 durante un robo.
El 13 de mayo, los investigadores atraparon a Alejandro Candia, de 33, quien posee una condena a 10 años y 4 meses de reclusión por los delitos de robo calificado, robo y amenazas.
El 29 de ese mes también recapturaron en Villa Tranquila del partido bonaerense de Avellaneda a Alfredo Rojas, de 34, un chaqueño radicado en Rosario condenado a 25 años de reclusión por homicidio agravado por el uso de arma de fuego, amenazas coactivas y lesiones graves. Y a Carlos Andrés D’Ángelo, 33, quien recibió una condena a 23 años en marzo de 2017 por el homicidio del comerciante Edgardo Giménez ocurrido en 2014 en la localidad de Granadero Baigorria.
Leandro Cabalié, de 32, sometido a una causa por homicidio, fue atrapado el 6 de junio pasado en un allanamiento en inmediaciones de Garibaldi y Alsina.
En tanto, el 25 de julio pasado cayó el octavo prófugo, identificado como Mariano Cardozo, de 29 y conocido como Pato, condenado a 14 años por el homicidio del repartidor de huevos Luis Orlando Segovia del 16 de mayo de 2008. A Cardozo lo atraparon en un operativo realizado en una casa de calle 2127 al 3800, casi esquina Avellaneda, en barrio Tío Rolo. Este procedimiento había sido solicitado por el fiscal Matías Edery en relación a una causa por amenazas calificadas.
