Eduardo Valdés confirmó este domingo que asumirá su banca en la Cámara de Diputados ante la renuncia de Pino Solanas, que fue convocado por el futuro presidente para ser embajador ante la Unesco. «No quiero ser funcionario. No voy a ir al gabinete de Alberto», aseguró en una entrevista con radio La Once Diez en la que sostuvo que, sin embargo, había hablado con Fernández «de la posibilidad de ser secretario general de la presidencia».
Al respecto, dijo que eligió declinar el ofrecimiento porque «uno cuando es funcionario no vive» y porque «en esta primera etapa me toca otro trabajo que es la de ‘regar la plantita’ de la unidad entre Cristina (Fernández), Alberto (Fernández) y Sergio Massa». «Voy a dedicarme fundamentalmente a eso porque algunos tenemos que hacerlo. Uno no es indispensable», admitió Valdés.
Por otra parte, respecto del debate sobre la despenalización y legalización del aborto y la reacción del Papa argentino, a quien conoce hace muchos años y con quien mantiene un vínculo frecuente, dijo que no será «un motivo de conflicto».
«En Roma está legalizado el aborto y no se excomulgó a nadie. La tendencia es que la interrupción legal del embarazo va a ser ley. Uno ve las sociedades hacia dónde evolucionan», sostuvo Valdés.
En esa línea, dijo ser de los que creen que «cuando hay embrión hay vida», pero que «la sociedad civil va a por un lado y lo religioso va por otro». «Creo que Francisco va a entender y a interpretar cómo va el mundo pero nunca va a decir que está de acuerdo. Tampoco es para morirse. No veo un conflicto por esto», afirmó el ex embajador.