Ante las diferencias entre la gestión saliente y la entrante respecto de la ceremonia de traspaso de mando del 11 de diciembre, el gobernador Miguel Lifschitz se mostró confiado de llegar a un acuerdo con su sucesor Omar Perotti.
La discrepancia está planteada: Perotti quiere recibir la banda y el bastón en un acto público en la explanada de la Casa Gris el 11 al atardecer; Lifschiz contrapropone que sea al mediodía en la Cámara de Diputados, donde será la jura, o en el Salón Blanco de Casa de Gobierno.
En medio de esos tironeos, el mandatario saliente dijo estar confiado de lograr un acuerdo: “Creo que llegaremos a un punto de acuerdo. Todos queremos que sea un acto de la democracia”.
En declaraciones a Cadena 3, durante una recorrida por la localidad de Colonia Dos Rosas y La Legua (departamento San Cristóbal), Lifschitz se refirió a la última polémica de la transición: la ceremonia del 11 de diciembre. “Estamos conversando. Hay alguna discrepancia de criterios, pero creo que vamos a llegar a un punto de equilibrio y acuerdo”, indicó el socialista.
“Queremos que sea un acto de la democracia e institucional. Que sea bueno para el gobierno que termina y bueno para el que comienza”, agregó Lifschitz.