El universo futbolero y el teatro son, por momentos, una especie de par dialéctico insoslayable. La literatura en general y la dramática en particular, con el Negro Fontanarrosa a la cabeza, han dado sobradas muestras de este romance.
Seducidos por este universo, un equipo artístico y creativo que comanda el director, dramaturgo y docente rosarino Adrián Almaraz dará a conocer este sábado por la noche para el público Diegote…como loco malo. Se trata de un unipersonal que cuenta la historia de un astro del fútbol cayendo en picada que en sí mismo es una especie de guiño a Maradona, que como consecuencia de una lesión termina internado en un sanatorio y desde allí evoca su mundo y su historia.
La obra lo tiene como protagonista excluyente al talentoso actor Juan Pablo Cabral, aunque el dúo, también responsable de los textos, se transformó en trío con el valioso aporte del escritor y ex futbolista Kurt Lutman, que acercó el imprescindible anecdotario, a lo que se suma además la música original de Diego Pereyra.
El personaje principal de esta historia, que se desdobla en esos otros que forman parte de su entorno, recibe las habituales visitas en el sanatorio en el que se encuentra internado, dejando al descubierto la trama oculta detrás del éxito. La familia, la amistad, los amores y el destino se combinan, desplegando un universo futbolero que le termina dando forma a un material donde el humor aparece en primer plano. “De todos modos, es una tragicomedia sensible y nostálgica”, expresó el director acerca de esta propuesta seleccionada como uno de los proyectos de este año del programa municipal Cosecha Escénica.
“Con Juan Pablo nos conocemos hace muchos años por haber compartido la formación en la Escuela Provincial de Teatro y Títeres. En 2014 lo dirigí, junto a Flavio Soso y Julio Cejas, en Los Opados, también de mi autoría, acerca de tres personajes internados en un psiquiátrico. Con esa obra estuvimos cuatro años en cartel, en diferentes temporadas, y en 2017 volví a convocarlo junto a Soso para actuar en Pingüino y Parlante, también escrita por mí, un material que mostraba la rivalidad y al mismo tiempo la hermandad del fútbol. Esa obra pasó por el ciclo de obras breves La Cocina de los Dramaturgos de 2017 y de algún modo allí se dispara la idea de trabajar el mundo futbolero en un nuevo proyecto”, contó Almaraz a El Ciudadano.
“Ya en 2018 –continuó el director–, Juan Pablo me acercó tres monólogos con los que empezamos a trabajar, ese fue el proyecto primigenio que presentamos a Cosecha Escénica; se llamaba sólo Como loco malo. Unas semanas después, desde Cosecha nos piden que enviemos un video con una pequeña muestra de la idea general. Esto nos llevó a leer distintos autores que hablan de la temática, entre otros Fontanarrosa, Eduardo Sacheri, Hernán Casciari y Eduardo Galeano, dado que en ese momento buscábamos un texto para adaptar. Presentamos lo que teníamos, algo muy crudo, para luego escribir una obra con un lenguaje propio, obviamente con más tiempo y dedicación; así fue el recorrido hasta llegar a este estreno”.
El texto propio
La selección del programa Cosecha Escénica para proceso de investigación y creación de un espectáculo teatral requería de un tutor. “Lo convocamos a Kurt Lutman, reconocido escritor y poeta, y al mismo tiempo ex jugador de fútbol, con un vasto conocimiento en la materia, alguien muy generoso que nos brindó mucha información de la trastienda del fútbol, mucho de lo relacionado con el éxito y el fracaso; nos nutrió de historias que nos llevaron a darle forma a una idea de obra y a disparar finalmente la escritura de un texto”, contó Almaraz.
“Trabajé el texto de Juan, le di forma, busqué un hilo conductor, lo anclé en tiempo y espacio, creé luego un personaje de ficción que me permitía unificar los diferentes monólogos. Fue así que de aquellos tres monólogos que había aportado Juan quedó sólo uno, el del representante, y luego se empezó a construir el universo familiar alrededor del personaje de ficción, que hasta ese momento no tenía nombre. En muy poco tiempo escribí los otros seis personajes que hoy están en la obra.
Además del representante hay un relator, la madre, el hijo, el abuelo, el presidente del club y el doctor. Todos giran alrededor de Diegote, el protagonista de una obra que es el resultado de una condensación de historias”, describió el director. Y completó: “Luego, con la obra más clara, empezamos a pensar los personajes con estéticas definidas; tuvimos la necesidad de componer intermedios audiovisuales que aportan a la unidad narrativa y para eso convocamos a Marcelo Yuvone, que supo darle forma a lo que teníamos en mente. Yanina Vincent se encargó del vestuario y la paleta de colores que dan forma a los personajes; Rodrigo Frías aportó el diseño y la confección de la escenografía, y Anabel Blanco se encargó del diseño gráfico, la fotografía y la difusión”.
Fútbol y teatro
“La relación entre el teatro, o el arte en general, y el fútbol pasa por una cuestión de idiosincrasia latinoamericana; es un deporte muy arraigado a las costumbres populares y sobre todo en el ADN de los argentinos. En este caso el teatro está teñido de la pasión futbolera y de muchos conceptos vinculados con el futbol. Incluso en el lenguaje cotidiano se utilizan muchas frases o metáforas que son propias del futbol; también se mezcla un poco en todos los que nos gusta el fútbol esa fantasía de haber querido ser un gran jugador en algún momento”, expresó el director que reconoció que en la obra se juegan esos conceptos de idiosincrasia y popularidad que son inherentes al más popular de los deportes a nivel planetario.
“También ese lenguaje futbolero ha teñido otros discursos como el político, porque es una manera sencilla de acercarse a la gente, más allá de que en algunos casos no sea algo genuino. Hay algo que subyace en nuestra cultura que es bien futbolero; por eso quizás me interesó hacer este link con los estadios de fútbol, con los clubes, con la popularidad, con la convocatoria; todos los aspectos que tienen que ver con el ritual del fútbol yo los emparento con el teatro más popular, incluso con el teatro griego antes de que algunos lo volvieran sólo para eruditos, y además con el circo. En cierto modo, en el fútbol hay algo de lo primitivo del teatro, donde juega el azar, lo imponderable, lo imprevisible”, cerró el director.
Para agendar
La obra teatral Diegote…como loco malo se presentará este sábado y el próximo, a partir de las 21, en Idae, de Entre Ríos 840