La dirigencia auriazul aguarda definiciones por el futuro de los dos jugadores solicitados como prioritarios por el técnico Diego Cocca: los defensores Miguel Barbieri y Nahuel Molina.
Racing, dueño del pase de Barbieri, no contestó aún a la oferta que hicieron desde Central por la mitad de la ficha del marcador centra. Mientras que Boca, propietario de Molina, no decidió aún si el lateral derecho formará parte del nuevo ciclo que comandará Miguel Ángel Russo. En caso de que Russo lo tenga en cuenta, los Canallas no podrán gestionar con los Xeneizes un nuevo préstamo de Molina.
Respecto de la situación de Barbieri, los Auriazules se mantienen a la expectativa. Es que la única oferta concreta que recibió Racing por el defensor es la de Central. Y si bien la cifra es inferior al dinero que pretenden los de Avellaneda por la mitad del pase del jugador (NdR: un millón de dólares ofertado contra un millón y medio pretendido), hay optimismo de que la propuesta pueda ser aceptada. Es más: el mánager Diego Milito le prometió darle una respuesta hoy a Raúl Gordillo, el encargado de llevar adelante la negociación. Si aceptan, la continuidad de Barbieri en Arroyito estaría asegurada, ya que el marcador central tiene un preacuerdo con los Canallas para firmar un contrato por 3 años de duración.
En cuanto a Molina, circulan versiones de que Juan Román Riquelme lo quiere en el plantel que comandará Russo. Si esto se confirma, se esfumarían las chances de que Central gestione un nuevo préstamo por el lateral. Y allí tomaría fuerza el nombre que adelantó este diario en su edición de ayer, el del uruguayo Federico Barrandeguy. El futbolista de 23 años jugó durante 2019 en Wanderers de Uruguay: 31 partidos disputados (28 como titular), 7 amarillas y 1 gol. De llegar a Arroyito, sería en condición de libre. Y también está en carpeta de Independiente y Goias de Brasil.
