Los ocho rugbiers detenidos por el crimen de Fernando Báez Sosa, del cual se cumplió ayer un mes, fueron trasladados esta mañana a la fiscalía de Villa Gesell donde eran indagados por segunda vez con la nueva imputación en la que son considerados “coautores” del homicidio, con el doble agravante de la alevosía y el concurso premeditado de dos o más personas y las lesiones sufridas por los amigos de la víctima.
Los acusados llegaron minutos después de las 8 a la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 6 de Villa Gesell, en un colectivo del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB) que los trasladó desde la Alcaidía de la Unidad Penitenciaria 6 de Dolores, donde están detenidos.
El micro tuvo el inconveniente de atascarse en la arena y por ello no pudo ingresar al garage de la fiscalía, por lo que los agentes penitenciarios tuvieron que bajar a cada uno de los imputados e ingresarlos a la sede fiscal caminando, esposados por la espalda y con la cabeza gacha, para evitar que los fotógrafos y las cámaras de TV pudieran tomarles sus rostros.
Esta es la segunda vez que los ocho acusados tendrán la posibilidad de dar su versión de los hechos y defenderse ante la fiscal de la causa, Verónica Zamboni, aunque ayer, su abogado, Hugo Tomei, no dio precisiones sobre si iban a hablar o si iban optar por negarse a declarar, como lo hicieron en sus primeras indagatorias, al día siguiente del crimen de Fernando.
Tomei había pedido que estas indagatorias fueran suspendidas, lo que fue rechazado, e insistió por otra parte en sus cuestionamientos a la actuación de Zamboni, a quien recusó y denunció penalmente por presuntas irregularidades ocurridas el día que indagó por primera vez a sus clientes.
En la ampliación de las indagatorias de hoy, la fiscal expondrá los elementos por los que decidió modificar su imputación, en la que considera que los ocho detenidos son coautores del homicidio, pese a que inicialmente, solo Máximo Thomsen (20) y Ciro Pertossi (19) figuraban con esa calificación.
Para Zamboni, existen pruebas para incluir bajo la coautoría del «homicidio doblemente agravado por su comisión por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas» a Luciano Pertossi (18), Ayrton Viollaz (20), Matías Benicelli (20), Lucas Pertossi (20), Enzo Comelli (19) y Blas Cinalli (18).
Los únicos que seguirán acusados como «partícipes necesarios» serán Alejo Milanesi (19) y Juan Pedro Guarino (19), quienes recuperaron la libertad el pasado lunes 10 de febrero, y está previsto que sean indagados mañana.
Además, los diez amigos serán imputados en el mismo grado por el delito de «lesiones leves», por los golpes sufridos por cinco amigos de Fernando, que intentaron ayudarlo durante el ataque frente al boliche Le Brique, en pleno centro de Villa Gesell.
En la nueva formulación del hecho que hoy les imputará a los rugbiers, la fiscal escribió que los ocho “acordaron darle muerte a la víctima Fernando Báez Sosa, distribuyendo funcionalmente el rol de cada uno” y que “aprovechando que estaba de espaldas e indefenso y actuando sobre seguro en virtud de la superioridad numérica y física existente”, comenzaron a golpearlo y patearlo hasta darle muerte.