El gobernador de la provincia, Omar Perotti, instruyó al ministro de Gobierno Esteban Borgonovo para la creación de una mesa de diálogo para abordar las problemáticas que se produjeron en las cárceles del territorio santafesino ante la demanda de las personas privadas de la libertad por mejores condiciones sanitarias para la prevención de la pandemia del Covid-19. La primera reunión será este viernes a las 17 en la sede de gobierno de la ciudad de Santa Fe y se da en el marco del cuarto día consecutivo de incidentes en las Unidades Penales 1 de Coronda, 2 de Las Flores y 11 de Piñero.
«Cárceles y Epidemia Covid-19» será la consigna que debatirá la mesa de diálogo que estará a cargo de la Secretaría de Justicia y contará con la presencia de los titulares del Servicio Público de la Defensa, del Ministerio Público de la Acusación (MPA), el Colegio de Magistrados y Jueces penales, el Ministro de Seguridad, la Secretaría de Asuntos Penales, las secretarías de Derechos Humanos (DDHH) y de Justicia, según informaron voceros oficiales para agregar que el objetivo principal será la búsqueda de consensos para la definición de acciones para la protección de la salud de la población carcelaria.
Incidentes y reclamos
En las revueltas del lunes y martes que se produjeron en estas cárceles, que son las más pobladas, hubo cinco víctimas fatales, una en Coronda y cuatro en Las Flores y también registraron seis reclusos heridos.
Los incidentes continuaron el martes en la Unidad 2 de la capital provincial con tres internos heridos con postas de gomas, el miércoles en Coronda, donde uno de los reclusos quedó internado por una herida en el tórax y este jueves por la noche hubo algunos disturbios en Piñero.
Primero, el pasado fin de semana, las personas privadas de la libertad reclamaron por mayores medidas sanitarias para la prevención del coronavirus y denunciaron que no contaban con elementos de higiene y no se aplicaban los protocolos de prevención por parte del personal del Servicio Penitenciario.
Esta situación se agravó ya que también se estaba reorganizando la entrega de turnos a los familiares para que acerquen a los penales mercadería y elementos de limpieza a los reclusos en medio de las disposiciones del aislamiento obligatorio por el coronavirus dispuestas por el gobierno nacional.
Los incidentes del lunes y el martes fueron los más significativos ya que hubo cinco víctimas fatales y gran cantidad de daños edilicios debido a que se produjeron incendios en algunos pabellones de Coronda y Las Flores.
Tras ello, familiares y allegados de las personas privadas de las libertad comenzaron a exponer, en general por redes sociales, que en los internos de dichos penales habían sido «engomados» –es decir encerrados en las celdas que comparten con al menos otras tres personas– sin acceso a comida ni agua. También advirtieron que muchos de los reclusos estaban heridos y no habían recibido asistencia médica.
Algunas de las fuentes allegadas a los internos refirieron que estas situaciones fueron el origen de los incidentes que ocurrieron durante la tarde del martes en Las Flores, en la madrugada del miércoles en Coronda y en la noche de este jueves en Piñero, los cuales no fueron de gran magnitud y terminaron controlados a las pocas horas por personal penitenciario, de acuerdo con lo informado por voceros oficiales.