Provincias y municipios implementaron desde abril servicios de contención psicológica, a través del trabajo voluntario de profesionales y no profesionales, para asistir a las personas afectadas emocionalmente –sobre todo adultos mayores– luego de casi dos meses de aislamiento y distanciamiento social para frenar el avance de la pandemia de coronavirus.
Así, el Ministerio de Salud bonaerense puso a disposición una página web (www.portal-coronavirus.gba.gob.ar) para dar respuesta a las demandas en salud mental de la población, contener y hacer derivaciones al canal telefónico gratuito de atención.
Se trata de un asistente virtual que indaga niveles de riesgo y necesidad de acompañamiento, en el marco de la pandemia por coronavirus. La interacción se inicia una vez que la persona ingresa su edad y su municipio de residencia.
De ser necesario, el asistente en salud mental establece conexión con una línea gratuita, donde los que llamen podrán contar con un equipo de profesionales de la salud que recibe consultas, realiza una escucha activa, acompaña y asiste en la derivación a centros de asistencia de la red provincial, y ofrece seguimiento en caso de ser necesario.
Jujuy también lanzó un programa de voluntariado social juvenil orientado a asistir a los adultos mayores y, desde fines de abril, ya son más de mil los muchachos y chicas que se registraron en el primer llamado, al que se agregará una nueva convocatoria, ya que el gobernador Gerardo Morales estimó días atrás que se necesitan «más de 12.000 personas» para acompañar a los 112.000 mayores de toda la provincia.
Por su parte, el gobierno de Río Negro dispuso una línea gratuita para ayudar y acompañar a los adultos mayores, mientras que un grupo de 8 psicólogas y psicólogos de Neuquén y Río Negro brindan atención gratuita a la población a través de Whatsapp, especialmente para quienes no cuentan con un tratamiento terapéutico en curso.
Además, los medios públicos provinciales (Canal 10 y la radio LU19) dispusieron programaciones pensadas para el esparcimiento. Como –por ejemplo- el programa «Activate en Casa», que transmitirá gimnasia funcional y clases de yoga.
En la ciudad, la municipalidad habilitó una red de apoyo telefónico para adultos mayores que ya tiene 1.100 voluntarios y recibe un promedio de 110 llamadas diarias.
El servicio, atendido por voluntarios que son supervisados por personal municipal, cuenta con un protocolo para mantener el diálogo y con «un manual de datos» que pueda serle útil al adulto mayor y abarca tanto la resolución de problemas materiales como emocionales, en este caso con voluntarios profesionales psicólogos «que implica otro tipo de escucha y acompañamiento», dijo a Télam el subsecretario de Desarrollo Humano rosarino, Lucas Raspall.
En Córdoba, el Gabinete Social del Centro de Operaciones de Emergencia implementó el programa «Mayores en Red», un acompañamiento telefónico por parte de personal capacitado que atiende consultas todos los días de la semana.
El programa brinda acompañamiento psicosocial, para atender las necesidades imperiosas de las personas mayores, mientras que en situaciones excepcionales de emergencia se activará un «Código Rojo», que dará lugar a intervención de una unidad especial. Varias ONG de voluntariados también complementan similares asistencia en capital y municipios del interior provincial.
En Mendoza, se desplegó una serie de servicios con el objetivo de asistir y dar respuestas a los ciudadanos: desde una línea gratuita que en su apertura contó con 50 estudiantes del último año de la carrera de medicina y 20 psicólogos de la Universidad Nacional de Cuyo, hasta otro sistema que depende de la Dirección de Salud Mental, dedicada específicamente a los profesionales de la salud que requieran asesoramiento.
San Luis implementó un apoyo psicológico a personas en cuarentena obligatoria por viaje o contacto estrecho con casos sospechosos de coronavirus: se trata de la iniciativa #TeAcompaño, una acción conjunta del programa de Gestión de Políticas en Salud Mental, el Colegio de Psicólogos de San Luis y la asociación civil Psicólogos Sin Fronteras.
El equipo de asistencia se conformó con 250 profesionales voluntarios que atienden por teléfono y videollamada durante las 24 horas, con la posibilidad de derivación, según los casos, a un servicio especializado, y que solo en la mitad de abril recibió 270 pedidos de intervención de personas adultas de toda la provincia.
