La operación por el préstamo de Joaquín Pereyra a Sporting de Lisboa está frenada. Más allá de que la dirigencia de Rosario Central ya había acordado las condiciones con sus pares portugueses para concretar la cesión, la negociación no pudo cerrarse. ¿La razón? Pereyra no dio el okey al contrato que le ofrecieron para jugar un año en Sporting. Por lo tanto, que la cesión del volante finalmente se lleve a cabo dependerá de hasta cuándo decida esperarlo el club lusitano. Así, lo que parecía un hecho, dejó de serlo. Y ahora es más factible que Pereyra siga en Arroyito antes que emigre. De todos modos, la historia aún no está completamente terminada.
La traba del acuerdo está centrada en la negociación entre Pereyra y Sporting de Lisboa. Central y los portugueses ya acordaron los detalles más importantes de las tratativas. Entre ellos, que los portugueses pagarán 200 mil euros por un año de cesión del mediocampista de 21 años. De ese monto, los auriazules sólo iban a percibir 70 mil, ya que Sporting iba a debitar 130 mil euros por una deuda que lo canallas mantenían con los portugueses para cancelar el pago del préstamo de Teo Gutiérrez que estuvo en Arroyito entre 2016 y 2017.
La diferencia entre lo que Pereyra pretendería percibir como salario y lo que le ofrecen los portugueses es menor. Pero que por ahora resulta decisiva para que la operación no se concrete. Y, según las fuentes consultadas sobre el tema, tampoco parece haber demasiada predisposición de parte de Pereyra para resolver el tema.
“Cuando una negociación no se resuelve en pocos días, generalmente termina fracasando”, le dijo un allegado al futbolista a este diario, generando baja expectativa de que las tratativas finalmente lleguen a buen puerto. La sensación que flota es que si existe alguna chance de que Pereyra vaya a préstamo a Sporting, dependerá de la paciencia de los portugueses. Por lo pronto, la semana que viene se reanuda la liga en aquel país, y tienen diez fechas por jugar. Y el libro de pases se abrirá recién cuando finalice la temporada.
Para Central, lo más importante no pasaba por los 70 mil euros que ingresaban por el préstamo de Pereyra a Sporting. La expectativa estaba puesta en la opción de compra que habían negociado los canallas con los lusitanos. Si a Sporting le interesaba retener a Pereyra en junio de 2021, debía pagar 1,5 millón de euros por el 50 por ciento del pase. Y un año más tarde, en junio de 2022, los portugueses estaban obligados a abonar 2 millones de euros más por el 30 por ciento de los derechos económicos. Por lo que los auriazules podían embolsar un total de 3,5 millones de euros por el 80 por ciento de los derechos económicos de Pereyra.
