Un vecindario se encuentra movilizado para impedir el desalojo de una familia de una casa ubicada en pasaje Quilmes 91 bis, esto es Esmeralda al 2200, en el barrio República de la Sexta, a metros de la Ciudad Universitaria. Según contó a El Ciudadano Claudia Fernández, quien ocupa el inmueble junto a cinco familiares, la medida judicial fue dispuesta desde el Juzgado Correccional de la 1ª Nominación, a cargo de Georgina Depetris y tiene como fecha establecida para hacer efectiva la orden el próximo jueves. Es por eso que vecinos de la zona junto a agrupaciones sociales anunciaron que realizarán una vigilia a partir de mañana a la noche donde se realizarán actividades culturales –entre ellas la pintada de un mural– para evitar que este grupo familiar quede en la calle y sin un techo donde vivir.
Claudia –que tiene 41 años y no tiene empleo fijo– vive en la casa desde hace dos años. “Hoy (ayer) estuvieron los vecinos junto a nosotros para apoyarnos frente a esta orden de desalojo. Nosotros ya tenemos decidido que nos vamos a quedar acá, porque yo ya viví en la calle y no quiero volver a hacerlo más. Es una situación muy dura por la cual padecí problemas físicos como pérdida del equilibrio por todos los problemas emocionales que eso me causaba”, comentó.
La familia de la mujer está compuesta por sus dos hijas, una de 17 y otra de 24, sus dos nietos, de cuatro y ocho años, y una sobrina que está a su cargo, según contó. “Cuando llegamos, la casa estaba abandonada, toda rota, con los techos llenos de problemas. Nos vinimos porque estábamos en la calle y la pintamos un poco. Siempre quise hablar con el dueño pero él nunca quiso dialogar conmigo. Y nos empezó a presionar mucho para que nos vayamos. Aunque sea queríamos contactarnos para pagarles algunos impuestos, pero nunca quiso escucharnos, nunca pudimos llegar a un acuerdo”, relató.
Desde hace un largo tiempo, Claudia está sin trabajo fijo y vive de empleos temporarios. “Laboralmente vengo muy mal. A veces, cuando puedo, hago trabajos de doméstica, plancho, hago un poco de cada cosa. Pero no es fácil poder sobrevivir en estos tiempos. Es por eso que necesitamos un techo, simplemente porque no tenemos”, añadió.
Sobre la actividad de mañana a la noche, Claudia comentó: “Se va a realizar una jornada de vigilia para frenar cualquier intento de desalojo. Nos van a acompañar los vecinos y juntos vamos a realizar una especia de encuentro cultural. Se va a pintar un mural en contra de los desalojos. Si bien yo estoy pasando por esta situación, no soy la única. Hay muchas personas en la zona con riesgo de desalojo y es por eso que hacemos esto. Por nuestro caso y por todos los demás que están pasando por situaciones similares”.
“A la orden de desalojo la recibí el jueves, la dejó la Policía y un hombre de traje. Hoy (ayer) estuvieron varios vecinos tomando mate con nosotros y acompañándonos en este momento difícil. Son horas de mucha tensión, de dormir mal, de incertidumbre, llenas de miedo y pensando constantemente sobre nuestro porvenir. Lo bueno y lo que nos mantiene en pie y luchando es que hay mucha gente que nos apoya. Estamos buscando una solución. No queremos volver a la calle, es algo durísimo. Nadie del Estado nos ayudó. Fuimos al Concejo pero nadie nos escuchó. Vamos a seguir peleando porque no tenemos dónde ir”, concluyó.