El crimen de Kevin Brest se produjo en un sangriento diciembre de 2018 en barrio Ludueña. El sospechoso de perpetrar el asesinato está preso desde mayo de 2019. Este martes, el fiscal del caso pidió readecuar la calificación legal por videoconferencia donde se le sumó una tentativa de homicidio y se mantuvo el encierro preventivo pero en medio de la audiencia surgió que el interno podría tener el mal de Chagas y la jueza dispuso que se realice un análisis bioquímico para determinar si padece la enfermedad.
La magistrada ordenó al director de la Unidad Penitenciaria Nº 11 que informara sobre las condiciones de higiene y alimentación del Pabellón 3, módulo A, donde se encuentra el acusado. También pidió saber si el interno se encuentra en huelga de hambre y cuales fueron las acciones tomadas al respecto.
El aislamiento preventivo social y obligatorio también impactó en la cárceles. Los internos y sus familiares vienen manifestándose sobre el agravamiento de las condiciones de detención durante la cuarentena.
El punto de mayor tensión sobre este tema se dio a finales de marzo cuando hubo una serie de levantamientos en las cárceles de la provincia que registraron cinco reclusos asesinados, en hechos que se están investigando, y graves daños materiales, especialmente en la Unidad Penal 2, de Las Flores, en la capital provincial. Esta situación generó la presentación de innumerables Habeas Corpus planteando situaciones generales y particulares de los internos respecto a la pandemia, aunque la mayoría no tuvo acogida en los Tribunales.
Esto se sumó a las huelgas de hambre que se vienen llevando los recluso adelante en la cárceles de la provincia para reclamar por mejores condiciones alimenticias y sanitarias.
En este contexto se realizó una audiencia para readecuar la calificación legal que en mayo de 2019 el fiscal Adrián Spelta le achacó a Gabriel Alcides S., alias el Negro Tito.
Spelta lo había imputado por la autoría del crimen de Kevin Brest. Un joven de 18 años que fue asesinado el 16 de diciembre de 2018 pasado el mediodía cuando dos hombres armados que llegaron en auto se bajaron en Cullen y Tupac Amaru. Primero, hirieron a Ezequiel G., de 17 años y amigo de de la víctima, a la altura de la rodilla y luego a Kevin en la espalda. El adolescente murió en el lugar.
Cinco meses después fue detenido el Negro Tito durante un allanamiento en zona norte. El fiscal lo imputó por homicidio agravado por el uso de arma de fuego, lesiones y portación. Ahora Spelta pidió agravar la imputación por el ataque a la víctima que logró sobrevivir, de lesiones a tentativa de homicidio agravado.
La defensa oficial a cargo de César Baroni hizo algunos ofrecimientos para lograr la morigeración de la detención y planteó una duda sobre la situación de salud de Negro Tito, ya que sospecha de que podría padecer la enfermedad de Chagas.
Ante el planteo, la jueza Silvia Castelli dispuso formalizar la readecuación de la imputación, mantener la medida cautelar de encierro pero ordeno que se realizara un examen al interno para determinar si posee la enfermedad y pidió al director de la Unidad Penitenciaria 11 que informe sobre las condiciones de higiene y alimentación del Pabellón 3, Módulo A, que ocupa el Negro Tito. También si se encuentra en huelga de hambre y qué medidas se tomaron en el caso.
Víctimas de las balas en barrio Ludueña
A finales de 2018 fueron varios los homicidios de adolescentes que se cometieron en barrio Ludueña. Nahuel Duarte tenía 16 años y lo asesinaron el 28 de noviembre en Tucumán y Solís. Por este crimen fue detenido e imputado Brian «Gordo» S. En su momento, los vecinos contaron que el Negro Tito y el Gordo eran hermanos y estaban detrás de los asesinatos que tenían como trasfondo la venta de drogas al menudeo.
Luciano Martínez, también de 16, fue golpeado ferozmente por un grupo de personas en Pitágoras y México, en un barrio cercano. Ocurrió el lunes 8 de diciembre, en el adolescente había salido de su casa de barrio Ludueña. Lo encontraron golpeado en una zanja a unas 10 cuadras. Según la teoría fiscal fue golpeado por cuatro jóvenes tras un presunto arrebato. Murió en el hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca) al día siguiente.
Luego se produjo el crimen de Kevin Brest y en navidad de ese año Jonatan Jerez fue baleado en cercanías de una cancha de fútbol en Tupac Amaru y Teniente Agneta. Falleció el 8 de enero de 2019 y la noticia derivó en una pueblada contra los presuntos agresores.
“Esta gente vende drogas, es siempre lo mismo. Ahora mataron a mi hermano y nunca la paga nadie. Son de acá a dos cuadras. Vienen a agarrar a los pibes, no sé si quieren que vendan drogas para ellos. Vienen y matan”, contó en aquel momento un familiar de Kevin.