Se vencen los contratos y las jugadoras comienzan a emigrar. En los últimos días se conocieron bajas significativas en el fútbol nacional. Primero se conoció la salida de Milagros Menéndez de Racing y luego se sumaron las de UAI Urquiza, en su gran mayoría, jugadoras de renombre.
Mili Menéndez armó las valijas y cruzó el charco. Jugará la próxima temporada de Granada, de España. El club español confirmó el fichaje de la delantera en sus redes oficiales. Menéndez firmará contrato hasta junio de 2022.
Y las despedidas siguen. Dalila Ippolito, también jugadora de Selección, se despidió de UAI Urquiza, aunque no confirmó aún cuál será su próximo destino. Todo indica que también irá a probar suerte al Viejo Continente, ya que así lo afirmó la jugadora. Incluso los medios italianos afirman que está en el radar de Juventus. Del Furgón también se fueron Solana Pereyra, Sofía Schell, Míriam Mayorga y Adriana Sachs. Pereyra, arquera de 21 años jugará en Ud Tacuense, equipo de Tenerife que milita en la segunda división de España. En tanto que Sachs, Schell y Mayorga no confirmaron sus próximos destinos.
Lo cierto es que son muchas las jugadoras del ámbito local que comenzaron a aparecer en el radar del fútbol internacional. Las grandes figuras como Ippolito, Menéndez y Pereyra, cruzan el charco después de vivir el primer torneo semi profesional de la historia del fútbol femenino criollo.
En Rosario siguen todas
Desde Central aseguraron que los contratos que vencían ayer fueron extendidos hasta diciembre de este año. Así, las ocho jugadoras que tienen un vínculo contractual con el Canalla continuarán vistiendo la camiseta auriazul, así como también el resto del plantel de Primera. Al mismo tiempo, desde la coordinación del área destacaron que hay tres jugadoras para sumar, pero que aún están esperando el alta de AFA. Por eso no quieren que trasciendan los nombres de las futbolistas, “por respeto al resto de los clubes”, aunque en su totalidad serán del ámbito local, de Rosarina.