El juez federal Rodolfo Canicoba Corral presentó su renuncia al cargo a partir del próximo 29 de julio, cuando cumpla 75 años, en medio del «hastío» que, sostuvo, le provocó la «erosión permanente» por parte de los «medios hegemónicos» durante los últimos cuatro años, al tiempo que se definió como una de las víctimas del presunto espionaje ilegal llevado adelante durante el macrismo.
«Estoy hastiado de los últimos cuatro años de la erosión permanente de los medios hegemónicos de aquellas personas que no les caemos simpáticos», sostuvo Canicoba Corral en declaraciones a El Destape Radio en las que, además, aludió a la causa por espionaje ilegal durante el gobierno de Mauricio Macri y dijo haber sido uno de los objetivos.
El magistrado presentó ayer su renuncia al cargo con fecha 29 de julio próximo, cuando cumplirá 75 años, edad límite que establece la Constitución Nacional para ejercer la magistratura.
Con su decisión, quedarán vacantes tres de los doce juzgados de instrucción del fuero federal porteño, que funciona en Comodoro Py 2002, del barrio porteño de Retiro, y donde se concentran las causas por corrupción abiertas a funcionarios públicos nacionales.
Canicoba Corral está actualmente a cargo de su juzgado, el federal 6, y también del 12, subrogado por él desde que su anterior titular, Sergio Torres, fuera nombrado integrante de la Suprema Corte de Justicia de la provincia de Buenos Aires.
Además, en los tribunales de Retiro está vacante el juzgado federal 11 tras el fallecimiento de su titular Claudio Bonadio, el 4 de febrero pasado.
Cuando su renuncia sea aceptada por el Poder Ejecutivo y se concrete, la Cámara Federal porteña deberá sortear un juez subrogante para su juzgado y para el 12, con lo que el caso Amia –entre otros expedientes– tendrá un nuevo magistrado a cargo, a días de cumplirse 26 años del atentado que todavía permanece impune.
El renunciante magistrado tiene, a su vez, varias denuncias abiertas en el Consejo de la Magistratura, todas ellas vinculadas a su patrimonio y su desempeño en causas judiciales, que no avanzarían en caso de aceptarse la renuncia.
Luego de presentada su dimisión y en declaraciones radiales, Canicoba apuntó al gobierno de Mauricio Macri y al espionaje que, según aseguró, también fue realizado en su contra.
«No tengo dudas», respondió al ser consultado sobre si fue uno de los objetivos de esta actividad ilegal.
El juez evaluó que «si bien es cierto que los servicios de inteligencia tienen un grado de autonomía, no es menos cierto que en última instancia se responde al jefe», al ser consultado sobre si pensaba que el ex presidente Macri pudo estar detrás de esas maniobras.
«No hay que ser Sherlock Holmes para darse cuenta que, si tiene cuatro patas y mueve la cola, es un perro», graficó Canicoba Corral.
Una de las últimas medidas firmadas al día de hoy por Canicoba Corral fue la citación a declaración indagatoria del ex titular de Vialidad Nacional en el macrismo, Javier Iguacel; del ex ministro de Economía Nicolás Dujovne; del de Transporte Guillermo Dietrich; y del ex Procurador del Tesoro Bernardo Saravia Frías.
A todos ellos, funcionarios de la gestión de Cambiemos, los citó a declarar en una causa en la que se investigan presuntos ilícitos cometidos en la renegociación de concesiones viales que habrían beneficiado a empresas del grupo Macri.
Las declaraciones están previstas para esta semana y el magistrado podría resolver situaciones procesales antes de alejarse de su función, sobre fin de este mes.
Canicoba Corral está a cargo de la investigación por el atentado a la Amia desde 2003, cuando la Cámara Federal porteña apartó de la causa al luego destituido ex juez Juan José Galeano y fue el magistrado que declaró como delito de «lesa humanidad» al ataque del 18 de julio de 1994 y ordenó la captura internacional de los ciudadanos iraníes actualmente acusados por la voladura de la mutual judía.
Además, tuvo a su cargo causas como la investigación por presunta defraudación al ex titular del Somu, Omar «Caballo» Suárez, y el año pasado abrió una investigación por presunta inteligencia ilegal a jueces, periodistas y otros afectados a raíz de denuncias de búsqueda de información en bases de datos sin orden judicial.
También, sobreseyó al ex titular de la AFI en el macrismo Gustavo Arribas en una investigación por supuesta transferencia irregular de fondos desde Brasil vinculada al caso Odebrecht.
En su entrevista con El Destape Radio, el magistrado adelantó además que demandará a los medios que lo ubican al «borde del juicio político», algo que tildó de «falso», y explicó que renunció al cargo con fecha 29 de julio tras cumplir 27 años como magistrado, pero seguirá en funciones hasta que se acepte su dimisión.
«Los medios dicen que me voy al borde del juicio político, lo cual es falso y me voy a dedicar a demandar a esta gente», advirtió y sostuvo que, «si algunos diarios dicen que es de noche y es de día, igual algunos prenden la linterna»
También se refirió a las críticas por la investigación del atentado a la Amia, a su cargo desde el 2003. «La causa Amia es parte de la campaña de difamación y desprestigio de varios medios» en lo que definió como «parte de una campaña de esmerilamiento» contra su persona.
«Dijeron que la Cámara me había ordenado en términos duros que avance en la causa Amia y es falso, ni me menciona», agregó al recordar que, como juez del caso, resolvió que el Memorándum de Entendimiento entre Argentina e Irán «no era inconstitucional» y que, al dictar ese fallo, recordó que «el único que podía pedir las bajas de las alertas rojas» de las órdenes de captura a ciudadanos iraníes por el caso era él como magistrado.
«Había intención de los iraníes de dejar sin efecto las alertas rojas, pero siempre estuvieron vigentes y el único que podía pedir el cese era yo», concluyó.