La Comisión Nacional de Actividades Espaciales (Conae) informó que la fecha probable de lanzamiento del satélite Saocom 1B está prevista entre el jueves 27 y el viernes 28, la semana que viene, y por ello durante la jornada de este viernes, 70 personas estaban participando del “último ensayo” desde todas las bases que controlarán el operativo en Buenos Aires, Córdoba, Bariloche, Estados Unidos, África, Italia, la Antártida, Perú, Noruega y las islas Kerguelen, en el océano Índico.
La Conae había informado el pasado 25 de julio que por decisión de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos la puesta en órbita del Saocom 1B había sido reprogramada para finales de agosto.
“La próxima ventana de oportunidades de lanzamiento prevista para fines de agosto, inicia el jueves 27, con opción el viernes 28. La fecha depende de un lanzamiento anterior, programado para el 26 de agosto”, explicaron voceros de la Conae.
Para el despegue se maneja un rango de fechas posibles, a lo que se le llama “ventana de oportunidades”, que se definen de acuerdo a muchas variables.
Esto significa que, por ahora, las fechas probables son esos dos días, en ambos casos a las 20.19 hora argentina, 19.19 hora de Estados Unidos, en la zona horaria en la que está la base de Cabo Cañaveral.
En la jornada de este viernes el equipo responsable del lanzamiento, en todas sus sedes y bases de comunicaciones y seguimiento estaba realizando un “ensayo full”, según lo definió la ingeniera Josefina Péres, subgerenta de la jefatura de proyectos de la Gerencia de Proyectos Satelitales de la Conae, en comunicación desde la sede del Invap (Investigaciones Aplicadas) en la ciudad rionegrina de Bariloche.
“Es el último ensayo que se hace”, explicó Péres, quien agregó que “el día del lanzamiento arranca 10 horas antes con un procedimiento conjunto entre la empresa del lanzador SpaceX, el equipo de Conae/Invap de Cabo Cañaveral, el de Córdoba, Buenos Aires y Bariloche, así como la empresa Veng y el Grupo de Ensayos Mecánicos Aplicados (Gema) de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP)”.
“Hoy se simula todo como si fuéramos a lanzar el satélite, pero sin el lanzamiento”, dijo sobre el ensayo técnico de este viernes, en medio de su desarrollo: es una tarea que lleva 10 horas ininterrumpidas de trabajo de todo el equipo, compuesto por 70 personas.
“Es un procedimiento en el que las últimas ocho horas son las más importantes, en las que se prueba el lanzador. El equipo Saocom de Cabo Cañaveral prueba el satélite, lo enciende, lo configura y verifica la telemetría”, agregó Péres.
También dijo que “desde Córdoba se comunican con Estados Unidos y chequean la comunicación con las estaciones externas”.
Esas estaciones, que son las que registran la comunicación terrestre con el satélite a medida que se va trasladando, están distribuidas “a lo largo del mundo en Noruega, África, la costa oeste de Estados Unidos, Italia, la Antártida, Perú y en las islas Kerguelen”, un archipiélago francés situado en el Océano Indico meridional, a 2.000 kilómetros de la Antártida.
Desde Argentina participan bases de Córdoba, Bariloche, Buenos Aires y Tierra del Fuego, en la localidad de Tolhuin.
“Todas estas estaciones son fundamentales porque permiten ver la órbita del satélite”, explicó Péres.
Una vez concretado el último lanzamiento y puesta en órbita del 1B, este y el Saocom 1A, lanzado en 2018, actuarán «en tándem» en el relevamiento de información, orbitando a 620 kilómetros de altura.
Juntos constituirán un sistema de dos satélites de observación terrestre equipados con un radar de apertura sintética SAR polarimétrico en banda L y una antena desplegada de 35 metros cuadrados.
Los satélites obtendrán y emitirán imágenes de muy buena calidad e información sobre los niveles de agua del suelo, fundamental para el agro, y además, permitirán obtener información sobre la presencia de buques en zonas bajo soberanía argentina.