Parece que fue hace una eternidad pero pasó apenas un año y medio desde el día en que el productor musical y organizador del Cosquín Rock, José Palazzo, dijo que no había mujeres con suficiente talento para cumplir con un cupo del 30 por ciento en festivales. La frase generó como respuesta la organización de distintos eventos con mujeres y disidencias al frente, y reavivó un debate que existía mucho antes de sus declaraciones y que el año pasado tomó forma en la histórica sanción de la ley de cupo femenino en festivales. En esa genealogía de las luchas feministas se imprime el Festival El Club del D7, una propuesta ambiciosa gestada por un grupo de mujeres que pensaron un evento virtual feminista, disidente y con paridad en el que la cultura de Rosario se mostrará al mundo. Será este sábado desde las 18, con 6 horas de transmisión y 60 artistas en 7 escenarios de espacios culturales de la ciudad.
Julia Cadoche es una de las organizadoras del Festival El Club del D7 y presidenta de la cooperativa que gestiona el Centro Cultural de Lagos 790. Junto con un grupo de gestoras culturales pensaron un evento al que definen como parte de la construcción de poder feminista. “Las mujeres, lesbianas, travestis, trans y no binaries venimos desarrollando muchísimas transformaciones no sólo a nivel cultural, sino político y social. Esta cuarta ola nos enseña muchísimo todos los días y creemos que este festival es en su espíritu feminista, porque propone la construcción de redes para salir de las situaciones de crisis, entendiendo que no somos autosuficientes y que la salida es colectiva”, contó.
La previa a la transmisión es para el grupo un aprendizaje constante y un correr detrás (o delante) de la curva creciente de contagios. Es que crear un festival en tiempos de Covid-19 significa pensar en cada detalle y en el cuidado de la salud de cada integrante. También implica cambiar de estrategias sobre la marcha y ser creativas en cada decisión. Por eso, pensaron en que el escenario no debía ser uno, sino siete desplegados en espacios culturales y emprendimientos de la ciudad, donde grabaron cada show con estrictos protocolos de streaming.
Cadoche explica que pensaron desde el inicio un festival con paridad porque están convencidas de que genera un efecto contagio en generaciones más jóvenes. “Hace años venimos escuchando a productores, curiosamente varones, decir que no se puede cumplir un cupo porque no hay mujeres que tengan bandas. Y podemos decir que no fue fácil construir el festival con paridad porque es cierto que muchas veces hay más bandas de varones o, por lo menos, son las que tienen más reconocimiento. Pero entendemos también que esa es una parte muy importante del problema. Si no empiezan a aparecer en las pantallas mujeres y disidencias, otras formas de ser y estar en este mundo, otras corporalidades, difícilmente las nuevas generaciones o las personas que tengan inquietudes artísticas puedan sentir que ese es un camino posible. Para este festival nos gusta imaginar a chicas y chiques mirando en sus casas y sintiendo que pueden ser quienes estén en el escenario en algún momento”, explica en diálogo con El Ciudadano.
La gestora cultural explica que pensar un festival con paridad significa salir del lugar cómodo como productores y pensar más allá de las primeras imágenes que vienen a la cabeza. “En ese ejercicio vemos que hay muchísimas mujeres y disidencias produciendo. Lo que hay que hacer es promoverlas. Para nosotras como gestoras del Distrito Siete es también una reivindicación de nuestra historia y es nuestra forma de pensar. Tiene que haber lugar para todes y no solamente para unos pocos que ya están consolidados”, agrega.
Cupo en festivales
En noviembre de 2019 el Congreso Nacional convirtió en ley el Cupo Femenino del 30 por ciento en festivales. La iniciativa fue fruto de la militancia de 700 artistas de todo el país y medios de comunicación en general. La ley no sólo se propone visibilizar a las músicas sino también a las mujeres y disidencias que se encargan del armado de escenarios, las que hacen puesta de luces, las sonidistas y más. Es que el escenario previo a la sanción era preocupante: según comunicó el Instituto Nacional de la Música (INAMU), el porcentaje promedio de mujeres en los escenarios es inferior al 15 por ciento.
Tras la sanción hubo distintos festivales durante el verano 2020 en los que se estrenó la representación justa. Pero con la pandemia de coronavirus la real implementación quedó en suspenso. La organización del Festival El Club del D7 muestra que, aún en épocas de streaming, lograr la paridad no sólo es posible sino urgente.
Para conocer toda la programación del Festival El Club del D7 entrá a esta nota:
De Rosario al mundo, la cultura se muestra en el Festival El Club del D7
Cobertura exclusiva de El Ciudadano
Desde la Cooperativa La Cigarra acompañaremos el Festival El Club del D7 con una cobertura exclusiva. Seguinos en nuestras redes y mirá la transmisión de este sábado acá
