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Increpó al transero del barrio al que conocía de toda la vida y terminó baleado

Se conocían de toda la vida, Matías, tenía 27 años y era un laburante, Leonardo T., 34 y vendía estupefacientes, según la barriada. Su hijo y su cuñado quedó involucrados en un robo a un familiar de Matías y la bronca no tardó en estallar.

Este lunes imputaron a Facturita por el intento de homicidio de su vecino, amigo y compadre Matías T., de 27 años. El hecho se registró el jueves pasado cuando la víctima fue atacada a tiros desde una moto en la puerta de su casa. Según algunos testimonios la víctima y el victimario eran amigos pero un robo a la casa un pariente de Matías, derivó en una bronca. Según algunos relatos Matías los enfrentó varias veces, los encontronazos terminaron a las piñas hasta que Matías fue baleado cuando se iba a trabajar. Ahora lucha por su vida en el HECA. La fiscal Georgina Pairola imputó a Facturita por tentativa de homicidio, abuso de armas y portación. La jueza actuante dictó la prisión preventiva del sospechoso por el plazo de ley.

Cerca de las 20 del 8 de octubre Matías T. salió de su casa en Avellaneda al 3200 a bordo de su moto rumbo al trabajo cuando fue atacado desde otra motocicleta en la que iban dos personas. El conductor iba con casco y hasta el momento no fue reconocido mientras que el acompañante de la Honda Bross sacó un arma y disparó contra la víctima una media docena de veces. Varios plomazos impactaron en el abdomen y el tórax de Matías que cayó en la vereda frente a su casa. Algunos vecinos lo trasladaron hasta el Hospital de Emergencia Clemente Álvarez dónde permanece internado en grave estado y con pronostico reservado.

Un joven de 27 años fue baleado en zona sudoeste y quedó internado en grave estado

Unos minutos más tarde un grupo de personas llegó hasta una casa ubicada en Dean Funes al 4000 a reclamar por el ataque a Matías, hubo pidrazos contra la vivienda, dónde dicen funciona un quiosco que vende además estupefacientes. El sospechoso bajó la persiana salió junto a algunos miembros de su familia armado y comenzó a disparar, lo que generó un desbande de gente aunque nadie terminó herido, relataron.

Según algunos testimonios del caso hace poco más de dos meses ladrones entraron a la casa de un familiar de Matías mientras dormían y se robaron algunas cosas. Esa propiedad linda con la vivienda de Leonardo Fatu o Facturita R. Matías iba periódicamente a la casa de Facturita, se conocían de toda la vida y tenían un buen trato, eran amigos a pesar de la ocupación de Facturita vinculado al comercio de estupefacientes. Matías no se involucraba, era un pibe sin problemas en el barrio, un trabajador, cuentan los allegados. En una de las visitas, la víctima vio que el hijo del sospechoso tenía uno de los objetos robados a su familiar. Según pudo saber el chico había entrado a la casa con un tío. Según el relato el adolescente estaba vendiendo en el barrio una zapatillas que se habían robado del lugar. Matías le preguntó a su amigo Facturita y se lo negó pero al tiempo se lo reconoció, estaba muy avergonzado. Le dijo que no se podía hacer cargo de lo que hacía su hijo y a Matías le dolió mucho, no tanto por los objetos robados sino por la falta de respeto, contó. Aunque otra versión dijo que se agarraron dos veces a las piñas.

Dos días antes del hecho Matías se encontró en un quiosco con el cuñado de Fatu o Facturita y el cruce de palabras terminó a las trompadas. Lucas se llevó la peor parte. El jueves cuando el muchacho de 27 años se iba a trabajar de cadete a un bar lo balearon, “fue el Fatu, fue el Fatu” llegó a decir, contaron algunos.

En el lugar se encontraron 6 vainas servidas de grueso calibre. Facturita fue detenido durante un allanamiento a su casa al día siguiente, también fue detenida parte de su familia incluida su mujer. Este lunes la fiscal Georgina Pairola lo imputó por tentativa de homicidio agravado por el uso de arma de fuego, abuso de arma y portación y pidió la prisión preventiva en su contra. Facturita fue asesorado por la defensora oficial Nancy Zulli y por orden de la jueza Marcela Canavesio quedó detenido preventivamente por el plazo de ley, es decir un máximo de dos años mientras avanza la investigación en su contra.

Detuvieron a Facturita por el ataque que dejó a un muchacho malherido en barrio San Francisquito

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