La Comisión Directiva del Festival de Doma y Folclore de Jesús María, que desde hace 55 años se realiza en esa ciudad del norte cordobés, anunció la suspensión de la edición 2021 debido a los “riesgos sanitarios” que representa la pandemia de coronavirus. Por otro lado, los defensores de animales, además de celebrar la suspensión de la que se preveía como próxima edición, seguirán con su plan de cancelar definitivamente esta actividad considerada “deporte provincial” en la que denuncian maltrato animal y un riesgo para los jinetes, con claros ejemplos de la muerte de uno de ellos, en enero pasado.
“Ante la situación mundial de la pandemia y los posibles riesgos sanitarios que producen las fiestas multitudinarias, la Comisión Directiva tomó la decisión de suspender la realización de la Edición N°56 en el año 2021”, se informó mediante un comunicado oficial desde la organización del evento.
El texto añadió que para tomar la decisión se analizó minuciosamente el contexto sanitario, y se concluyó que “por sobre toda urgencia laboral y recreativa continuamos valorando la salud”.
En ese contexto, los organizadores sostuvieron que debido a la gran convocatoria que genera el festival, se “hace imposible mantener un control adecuado sin poner en riesgo la salud de vecinos y turistas”.
“Pronto nos volveremos a encontrar con la alegría que nos caracteriza, para vivir más que nunca enero en la piel en Jesús María, tierra de doma y folklore, de sensaciones y emociones, legendarias historias y tradición hecha música, una vez más juntos unidos por nuestra cultura”, resaltó el comunicado.
La suspensión en Jesús María se suma a la que ayer comunicaron los organizadores del Festival Nacional de Jineteada y Folclore de Diamante, en Entre Ríos, que también definieron que la edición 2021 fuera cancelada por la pandemia.
En este caso, se trataría de la edición 50 aniversario del encuentro tradicional, ahora postergado para 2022.
Protectoras de pie
Los grupos dedicados a la protección de animales celebran esta decisión a pesar de que se deba a una pandemia. A su vez continuarán con las denuncias a los organizadores del Festival de doma y folclore por maltrato animal.
La ONG proteccionista de Córdoba Sin estribo realizó en enero de este año una denuncia penal contra los organizadores del Festival de doma y folclore en Jesús María por maltrato animal y pidieron que se cancele el evento. Andrea Heredia de Olazabal, referente de la asociación, dijo en su momento que se realizó una presentación judicial porque entienden que es una violación a la ley penal 14.346 de maltrato animal.
En la misma sintonía, voceros de la fundación la Asociación Civil Lucha por la Integridad Social y el Derecho Animal (Aluisa), consideraron que no se respeta la ley de maltrato animal porque: “La ley en su artículo 13 inciso 8 considera actos de crueldad realizar actos públicos o privados como corridas de toros, novilladas y parodias en que se mate, hiera y hostilice a los animales, por lo que la jineteada se encuentra en este tipo de actividades porque matan, hieren y hostiliza a estos animales”.
Se habla de parodia porque la actitud agresiva del caballo no es natural, sino que es en respuesta a los ataques con las espuelas y una serie de movimientos, gritos y latigazos que le da el jinete. Por este motivo los caballos están asustados y aterrorizados.
A pesar de la ley nacional, en Córdoba las jineteadas están amparadas por la ley 8.952, definiéndolas como un deporte de interés provincial.
Además, desde las protectoras de los animales consideran que también es un peligro para el jinete, que en ocasiones muere como sucedió en la edición pasada con el hombre de 40 años que murió por las fracturas y hemorragias productos de la caída del caballo encima suyo.
