El presidente Alberto Fernández se mostró este martes junto al líder camionero, Hugo Moyano, y remarcó que su presencia en los sindicatos «no debe llamar la atención» porque «antes que nada» él es «un compañero».
«Que yo esté en los sindicatos no debe llamar la atención de nadie. En política, uno asume compromisos, de a quién quiere representar. Cuando hicimos el Frente de Todos tuvimos en claro que debíamos representar a los que peor estaban y a los que trabajan», sostuvo el mandatario.
Al encabezar el acto por el Día del Camionero, el jefe de Estado agregó: «Nunca quiero dejar de ser un compañero. Antes que nada soy un compañero y quiero seguir siéndolo. Axel es un compañero. Cristina es una compañera. Estamos para ayudarlos, ponernos de su lado, ver de qué manera reconstruimos una Argentina que era tierra arrasada».
En ese marco, remarcó el crecimiento del Sindicato de Camioneros y afirmó que es «mérito de una gestión que lleva muchos años y se debe reconocer», ante lo cual celebró la figura de Moyano «proteste quien proteste, le guste a quien le guste, se enoje quien se enoje».
Fernández remarcó que el oficialismo «sabe cuáles son los intereses que quiere representar. Los que la están pasando muy mal y quedaron sumidos en el pozo de la pobreza y los trabajadores».
«En todo ese tiempo nunca dejamos de tener en cuenta a quiénes representamos. Nos preocupamos para que los trabajadores formales pudieran mantener su empleo formal, por eso hicimos el ATP», señaló.
Y destacó: «No tuvimos ningún dilema: primero preservar la vida, segundo garantizar el trabajo y tercero garantizar la producción. Así lo hicimos. Si la vida quiso hacernos pasar la prueba de peronistas, aprobamos, Axel, aprobamos. No hemos claudicado en ninguno de los objetivos. Tuvimos que adaptarnos a un escenario muy complejo por el virus».
En el acto, realizado en la sede del Sindicato de Camioneros, el Presidente afirmó que en la pandemia se pudo «verificar la importancia de la organización de quienes trabajan» y acusó a la oposición de «querer hacerle creer a la gente que los sindicalistas argentinos no tienen solidaridad», al agradecer la decisión de las organizaciones obreras de poner a disposición del sistema público sus instituciones sanitarias.
«Somos peronistas: frente a la adversidad nos arremangamos, nos ponemos a trabajar y ponemos el pecho», insistió el mandatario.