Se ganó ser el “chico de la tapa”. Alan Marinelli fue la gran figura de Rosario Central en la goleada sobre Patronato por 4 a 0 en el Gigante. En su primer partido como titular en la máxima categoría, el delantero auriazul de 21 años hizo dos goles, y participó activamente en prácticamente todas las acciones ofensivas de su equipo. Marinelli tuvo su tarde soñada, llena de emociones. Y eso se reflejó en el festejo del primer gol del partido, cuando se le escaparon algunas lágrimas.
El Tanque, como lo apodan sus amigos, nació el 7 de abril del 1999 en el barrio 7 de Septiembre. Hizo las categorías del Baby en la Academia Jorge Griffa. Y a los once años se sumó a las divisiones inferiores de Central donde desde 2013 pasó por todas las categorías de AFA, de novena hasta la cuarta. Y lo hizo soñando cada día con este momento, el que vivió el lunes ante Patronato, jugar su primer partido como titular y, de yapa, convertir por duplicado.
“La verdad es que desde siempre, jugando en las inferiores y en la reserva, se genera el deseo de hacer un gol en el Gigante. Es más, la sensación es tan fuerte, que la noche previa al partido con Patronato soñé que hacía un gol. Al final fueron dos, así que estoy doblemente feliz”, confesó Marinelli, autor del primer y tercer tanto de la victoria canalla ante los paranaenses.
Hasta el partido del último lunes, Marinelli tenía ocho participaciones en primera división. Pero siempre ingresando desde el banco. El Tanque debutó de la mano de Diego Cocca. Eso fue el 4 de abril de 2019, cuando los auriazules derrotaron a Aldosivi en Mar del Plata por 2 a 1, en el partido de vuelta de la primera ronda de la Copa de la Superliga. Con Cocca, Marinelli sumó seis juegos en primera, siempre como suplente. Y en el ciclo que encabeza Kily González, tenía dos participaciones: en los segundos tiempos frente a Godoy Cruz en Mendoza y ante River en Arroyito.
“La verdad es que estoy muy contento por el equipo, tuvimos un buen funcionamiento colectivo y pudimos quedarnos con los tres puntos en el arranque de esta nueva Fase del torneo; la idea está, ahora creo que estamos encontrando el funcionamiento”, dijo Marinelli, que arrancó la Copa rezagado respecto del resto de sus compañeros. Es que sufrió una lesión muscular durante la pretemporada que le impidió participar en los amistosos. Y eso lo puso en desventaja de cara a la pelea por ganarse un lugar entre los once en el inicio de la Copa Diego Maradona.
“Los dos hacer goles en primera con esta camiseta es algo que siempre soñé, y lo pude cumplir; en el primero, cuando entré al área le iba a pegar de zurda, pero vi que el arquero salía y preferí tocar la pelota con la derecha”, recordó el delantero canalla sobre la conquista con la que Central empezó a ganarle a Patronato. Pero, aunque fuera de Arroyito, Marinelli ya sabía lo que se siente al anotar goles importantes. Jugando para la selección Argentina Sub 20, el Tanque marcó el tanto de la victoria en la final del torneo de L´Alcudia, en la ciudad española de Valencia. Fue 2 a 1 sobre la selección de Rusia y título para el equipo argentino que por entonces dirigía Lionel Scaloni.
“Suma mucho esto de ganar un partido por la diferencia que lo hicimos; pero esto recién empieza, falta mucho, tenemos que seguir enfocados porque nos quedan cuatro finales por delante para tratar de ser los primeros en el grupo”, opinó Marinelli a modo de conclusión sobre el triunfo ante Patronato. Y también hizo una breve referencia sobre cómo se sintió: “Creo que con el correr de los minutos me fui serenando y eso me sirvió para tomar confianza”.
Por último, Marinelli reconoció la paridad de nivel que existe entre los delanteros del plantel, y las dificultades que esto genera para poder ganarse un lugar en el equipo titular. “La verdad es que hay una competencia muy sana por el puesto entre varios delanteros que integramos el grupo de primera división. Esto te obliga a entrenar al máximo y a dar todo cuando te toca; después, jugará el que el técnico considere que está mejor”, señaló.