Otros dos jóvenes fueron imputados este jueves por la brutal agresión sexual en manada que sufrió una adolescente durante la madrugada del 13 de diciembre pasado, en la misma noche que celebraba su cumpleaños de 15 en barrio Ludueña.
El fiscal Ramiro González Raggio acusó a Juan Roberto S. y Franco Ezequiel G. de los delitos de abuso sexual con acceso carnal doblemente agravado por resultar un grave daño a la salud física de la víctima y por haber sido cometido por dos o más personas en calidad de coautores.
Al finalizar la audiencia, la jueza Valeria Pedrana dictó la prisión preventiva de ambos jóvenes por el plazo de 90 días. Con ellos ya son cinco los imputados detenidos por violación, además de la mamá de uno de ellos quien está privada de la libertad por el delito de encubrimiento, ya que fue en su casa donde se cometió el feroz ataque, vivienda que más tarde fue incinerada por los vecinos.
Inolvidables 15
La adolescente fue atacada la misma noche que celebraba su fiesta de 15, en su casa de barrio Ludueña. Era un cumpleaños sencillo con familiares y algunas pocas amigas y amigos. Entre los presentes apareció un vecino de 18 años, quien aprovechó la vulnerabilidad de la cumpleañera —algunos dicen que le puso algo en la bebida— quien se sentía algo mareada, y en contra de su voluntad la llevó a la casa de su mamá, ubicada en Ghandi al 5900, a dos cuadras de la fiesta.
Allí, entre 2 y las 4 de la madrugada, al menos cinco muchachos la atacaron sexualmente, de acuerdo a lo reconstruido por la Fiscalía.
El joven que se llevó a la cumpleañera fue sindicado desde el primer momento por los familiares de la adolescente, quienes notaron en medio de la fiesta que había desaparecido y rápidamente la empezaron a buscar. La encontraron unas horas después en Einstein y Solís, a cinco cuadras de la casa de ese vecino, en estado de shock, gravemente herida y toda ensangrentada.
La adolescente quedó internada luego de una operación por las graves lesiones físicas que sufrió además de recibir asistencia psicológica por las secuelas que le dejó la agresión.
Algunos testimonios de allegados de la víctima indicaron que allí la abandonó la mamá del vecino que se la llevó, quien al advertir el brutal ataque que había cometido su hijo con sus cómplices, la sacó de su casa y la dejó en la calle.
Su hijo, identificado como Facundo G., de 18 años, fue detenido ese mismo domingo e imputado dos días después por el fiscal González Raggio por el delito de abuso sexual con acceso carnal agravado por resultar un grave daño a la salud física de la víctima en calidad de coautor, donde le dictaron la prisión preventiva por el plazo de ley.
Según trascendió, el muchacho reconoció haber actuado solo en el abuso, lo que en un principio coincidió con la primera declaración de la víctima, quien al despertar en la cama del imputado dijo haberlo visto solo a él y escuchar a su madre decirle que lo iban a meter preso por lo que había hecho. Sin embargo, el mismo martes que lo imputaron cayó detenido un segundo sospechoso, Paulo L., de 26 años, durante un allanamiento en una casa de Tupac Amaru y Liniers, también de barrio Ludueña.
Según trascendió, la investigación llegó a él a partir de mensajes de Facebook que le enviaba a su prima para que le diera refugio en San Lorenzo. Eso permitió detener también a la madre de Facundo, Sandra S., de 46 años, quien se presentó de forma espontánea en la oficina del Centro de Justicia Penal. El fiscal González Raggio ordenó que quede detenida y la imputó por encubrimiento.
Luego de esas detenciones fueron ordenadas otras tres capturas para dos hermanos del primer imputado y un tercer hombre que era buscado.
Los tres se presentaron esta semana en la sede fiscal, donde fueron imputados y quedaron detenidos con prisión preventiva por 90 días.
