La organización ecologista Greenpeace reclamó por la libertad de sus activistas presos en Rusia desde hace un mes “por denunciar los planes de explotación petrolera en el Ártico de las empresas Gazprom y su socia Shell”. En la tarde de ayer unos cuarenta voluntarios participaron de la acción en la estación de servicio de la marca angloholandesa de avenida Pellegrini y España, donde desplegaron un cartel con la leyenda “Libertad a Camila y Hernán”, y 30 de ellos, esposados, representaron a los detenidos.
“Hace treinta días que Camila, Hernán y los 28 activistas permanecen detenidos acusados absurdamente de piratería. El verdadero crimen es perforar en búsqueda de petróleo en el Ártico y seguir utilizando combustibles que provocan el cambio climático”, explicó el director de Movilización Pública de Greenpeace en Argentina, Hernán Nadal.
El día de “acción global” por la liberación de los detenidos en Rusia acusados por cargos de piratería se realizó ayer en 36 ciudades del mundo con la movilización de unas 10 mil personas, lo que se sumó al pronunciamiento de once ganadores del premio Nobel de la paz, entre ellos el argentino Adolfo Pérez Esquivel, que enviaron una carta al presidente Vladimir Putin pidiendo la libertad de los activistas presos.