Edición Impresa

Díficil tarea

A rearmar la última línea en Central

Pinola lesionado, Álvarez no sigue y Donatti quiere emigrar. A barajar y dar de nuevo en defensa.


Es el escenario menos deseado. Eduardo Coudet tendrá que armar una nueva defensa para afrontar el torneo que viene. Con dos bajas seguras, la del lesionado Javier Pinola y la anunciada de boca del propio Pablo Álvarez por motivos personales, el Chacho se verá obligado a acelerar la contratación de refuerzos para la última línea. Ni hablar si a este cuadro se le agrega la situación de Alejandro Donatti, que ya ratificó su deseo de “cambiar de aire” y, además, en las últimas horas rechazó la oferta que le realizó la dirigencia Canalla en un intento por torcer su intención.

Los tres defensores jugaron, cada uno, en por lo menos 20 de los 26 encuentros que disputaron los auriazules en el primer semestre . Estos números marcan, claramente, la consideración de Coudet por ellos a la hora de armar la mejor defensa posible. Y, además, pone de manifiesto la urgencia que se generó por conseguir refuerzos para el sector. Lógicamente que, para mantener la competitividad y el protagonismo que adquirió el equipo en este último tiempo, hoy existe obligación de sumar futbolistas de comprobada jerarquía para reemplazar a los que no estarán.

La baja de Pinola no será sorpresa para Coudet. El defensor sufrió una fractura de tibia derecha el pasado 12 de mayo, jugando por la Copa ante Atlético Nacional de Medellín en Arroyito. Y tendrá entre 5 y 6 meses para volver.

Sin Pinola en el arranque, el Chacho mantenía expectativas de que Álvarez siguiera en el plantel. Al menos hasta fin de año, fecha en la que caducaba su vínculo a préstamo con Central. Sin embargo, el defensor de 32 años decidió anticipar su salida del club. Y lo confirmó hace pocas horas, en el programa Arroban. ¿Los motivos? “Extra futbolísticos, tengo un problema familiar”, dijo Álvarez, sobre una situación que ya es conocida en el “Mundo Central”, y que justifica largamente esta determinación del ex Catania de trasladarse a Buenos Aires para estar cerca de los suyos.

A este complejo cuadro de bajas en defensa, se agrega la de Donatti. El Flaco ya había anticipado en enero que tenía intenciones de emigrar. No habló de ciclo cumplido, pero sí de “cambio de aire”. Y todo esto más allá de cuestiones contractuales o económicas. Tanto es así que, en las últimas horas, el marcador central rechazó una importante oferta que le realizó la directiva auriazul buscando modificar su postura de emigrar.

Donatti le dijo no a un nuevo contrato, lógicamente mejorado, más allá de que el actual finaliza en diciembre del año que viene, y a una propuesta para comprar la mitad del pase que el club de Arroyito no posee. Evidentemente, sus intenciones de “cambiar de aire” son firmes. Al menos, hasta que no aparezca un equipo decidido a poner los dos millones de dólares para activar la cláusula de rescisión del contrato vigente, el Flaco no podrá partir. El martes, Donatti se tendrá que presentar a entrenar, en el arranque de la pretemporada del plantel. Aunque en Central saben de su deseo que, esta vez, parece mucho más firme que el que expresó a principio de año.

No estarán los que más minutos jugaron

Para afrontar la primera parte del torneo que se viene, Central podría dejar de contar con tres de los cuatro defensores más utilizados en lo que va del año. Ya hay dos bajas seguras: el lesionado Javier Pinola, que protagonizó 20 de los 26 juegos (11 por el torneo local y 9 por Libertadores); los mismos que Pablo Álvarez (11 por el campeonato y 9 por Copa), que rescindirá su contrato a préstamo con el Canalla en los próximos días.

A ellos hay que agregar a Alejandro Donatti, cuya continuidad está más que en duda. El Flaco fue el que más jugó, titular en 22 encuentros (13 del torneo y 9 por Libertadores).

El único sobreviviente de la última línea ideal del Chacho en la primera parte del año, es Víctor Salazar. El tucumano participó en 12 cotejos del torneo local y en 9 por Copa Libertadores.

Más atrás, aparecen las situaciones de un par de futbolistas que, en este escenario, podrían ganar algo de terreno: Cristian Villagra, y Germán Burgos.

Villagra, que mostró problemas físicos a partir de una lesión en un tobillo, disputó 11 partidos: 10 por el campeonato de primera división, y sólo 1 por la Libertadores. Y Burgos aportó en el último tramo, con 7 participaciones, la mayoría en la Copa (5 partidos).

Luego están los “jugadores de la casa”, Paulo Ferrari y Mauro Cetto. Ellos dos, generalmente participaron cuando Coudet decidió preservar titulares. El Loncho estuvo en 8 cotejos (6 del torneo y 2 de la Copa); mientras que el Colo, apenas si jugó en 4 encuentros del campeonato de primera.

Comentarios

10