Por Miguel Passarini / Luciana Mangó
La murga proveniente de la localidad de Bigand Ladrones de Sonrisas se presentará está noche, a partir de las 22, en el teatro auditorio de la Plataforma Lavardén (Mendoza y Sarmiento). La agrupación, conformada por 13 jóvenes amantes del género, presentará su nuevo espectáculo Destino –una obra que se interroga respecto de si los hombres son dueños o no de marcar su propio camino–, que contará con la participación de los artistas Franco Moscatti y Gonzalo Zabala.
“El pasado 16 de marzo participamos junto con la reconocida murga Agarrate Catalina, en el show que brindó en el Anfiteatro Municipal Humberto de Nito, donde adelantamos parte de esta nueva propuesta que ahora traemos a Rosario como estreno oficial”, expresó Franco Frare, uno de los integrantes de Ladrones de Sonrisas, al tiempo que agregó: “Destino es un show que aborda la eterna discusión acerca de si el destino está marcado o si cada uno es dueño de elegir el propio. Esa dialéctica atraviesa todo el espectáculo, que, a su vez, recorre diferentes temas de actualidad”.
Nacida en 2009 tras la influencia del fenómeno murguero rioplatense, Ladrones de Sonrisas agrupa a jóvenes amateurs que se reunieron motivados por la necesidad de expresar algo. De esa unión, y luego de un año de trabajo colectivo, surgió su primer espectáculo Flores, un show que describía la vida de un trabajador a través del humor y la ironía, y con el que recorrieron diversas localidades del país. Actualmente, la murga de Bigand llevará al escenario su segundo espectáculo, que los encuentra renovados y con ganas de seguir creciendo.
Respetando la estética y estructura de la murga uruguaya, Ladrones de Sonrisas se esmera por incorporar una impronta propia que pueda reflejarse en cada show. “Tratamos de hacer las cosas básicas del estilo pero sin imitar a las murgas uruguayas, sino buscando adecuarlo a nuestra región y conservar las raíces locales”, señaló Claudio Ghisio, actual director de la agrupación, mientras que Frare agregó: “No podemos alejarnos de nuestro origen, entonces tanto la temática como la forma de expresarla tienen un condimento muy pueblerino. Nosotros somos de Bigand, una pequeña población de cinco mil habitantes, donde nos criamos entre el folclore y el rock, y eso se refleja en las melodías que escogemos para versionar. Así como los uruguayos se basan en el candombe o la música brasileña, nosotros elegimos folclore y rock para cantar”.
En lo referido a lo musical, la murga tiene arreglos a tres voces, además de tres miembros en percusión, con redoblante, bombo y platillos. Respecto a sus letras, la agrupación intenta reflejar la realidad que vive cotidianamente, haciendo hincapié en las problemáticas sociales y sobre todo, en aquellas que atañen a la región. Al respecto Ghisio expresa: “Tratamos de cantar las cosas que pasan en nuestro pueblo, sin pretender ser tan universales y masivos. Nuestros espectáculos tienen mucho contenido social, político y, sobre todo, mucho humor. Tenemos una postura crítica y siempre tratamos de contar la realidad que nos moviliza a todos, sobre hechos que ocurren en nuestra región principalmente”.