Las denuncias públicas realizadas hace menos de un mes por el fiscal de Rufino Mauricio Clavero, en las que acusó al juez federal Marcelo Bailaque de “no avanzar” en 15 casos de narcomenudeo que remitió a su juzgado, tuvieron anteanoche una respuesta cuando su superior, el fiscal regional de Venado Tuerto Alejandro Sinópoli, le envió a un fiscal de Melincué para que le lea sus “derechos” y determine si se excedió en sus funciones al investigar temas de narcotráfico que no son de su competencia.
La noche del miércoles, el fiscal regional Sinópoli ordenó una serie de medidas sobre la Fiscalía de Rufino que conduce Clavero, entre ellas el envío del fiscal Tomás Merlo para que le lea sus “derechos”.
Sinópoli explicó que si bien “no hubo atribución imputativa”, Clavero “tiene derecho a una defensa”. En diálogo con el portal de noticias Rosario3.com, Sinópoli agregó que la causa penal contra el fiscal de Rufino se debe a que “admitió públicamente que investigaba narcomenudeo y narcotráfico a pesar de saber que no era de su competencia”. En ese sentido aclaró: “Lo que hice fue instruir una investigación penal preparatoria”.
Hace menos de un mes, el fiscal Mauricio Clavero brindó una conferencia de prensa en la que dijo haber elevado al Juzgado Federal Nº 4 de Rosario 15 casos de narcomenudeo y narcotráfico de Rufino y que no se avanzó en ninguno. Luego denunció que sus superiores del Ministerio Público de la Acusación (MPA) buscaban “silenciarlo” mediante la prohibición de hablar en medios de comunicación.
Anteayer por la tarde, tras las medidas ordenadas por Sinópoli, distintos rumores circularon en Rufino sobre “la intervención de la Fiscalía”. Si bien eso no ocurrió, y el accionar se limitó a una acusación penal contra Clavero para determinar si investigó casos de narcotráfico a partir del accionar de la Policía de Investigaciones (PDI), la noticia movilizó a decenas de vecinos al juzgado penal para brindar su apoyo a Clavero.
Esas personas impidieron que el fiscal Merlo se retirara del lugar hasta que el mismo Clavero salió a pedir calma. Mencionó que sus superiores “le pegaron en la cabeza” en vez de protegerlo y les dijo a los vecinos: “Ustedes son mi fortaleza”.
Ya entrada la noche, se hicieron presentes en el lugar el presidente del concejo deliberante Alberto Mazzucco, el concejal Gustavo Dehesa y Estrella Corona y Natalia Ferrero del Colegio de Abogados. Poco después llegó también el intendente Natalio Lattanzi y el jefe de Gabinete Arturo Patimo, según publicó la Tribuna del Sur Rufino.