Un efectivo del Comando Radioeléctrico fue detenido ayer y será imputado este mediodía junto a otros cinco policías por pedirle 400 mil pesos a un hombre acusado de homicidio para dejarlo en libertad. La víctima de la extorsión es uno de los sobrinos de Roberto “Pimpi” Caminos que estaba mencionado en un asesinato perpetrado en barrio Municipal en diciembre pasado. Se trata del crimen de Carlos Leonel Juárez, quien enlutó la última Navidad y engrosó la lista de muertes por las disputas territoriales en ese sector de zona sur, que en 2016 se cobró una veintena de vidas. La mecánica de corrupción de agentes del Estado que se escuchará en la audiencia de hoy (según la Fiscalía los uniformados montaron una persecución que no existió al no conseguir el dinero exigido) le agrega a las balaceras, muertes y venganzas que pujan por el control del narcomenudeo en la periferia de la ciudad un protagonismo policial que pocas veces se ventila en los Tribunales provinciales.
La audiencia imputativa contra el agente Livio Ariel M., detenido ayer tras un allanamiento en Avenida del Rosario al 2100, tendrá lugar a las 12 de hoy ante el juez de Garantías Carlos Leiva. El efectivo, quien acumula causas en las unidades de Violencia Institucional y Violencia de Género, será imputado junto a otros cinco uniformados del Comando Radioeléctrico por un hecho que tuvo lugar el 23 de enero pasado en barrio Municipal.
Si bien la Fiscalía no adelantó bajo qué figura legal será acusado el sexteto (podría ser tentativa de extorsión o cohecho pasivo), informó que la causa investiga el pedido de 400.000 pesos a Fernando Andrés Caminos, de 24 años, sorprendido en la vía pública, cerca de su casa de Lamadrid al 100 bis, a cambio de que continúe en libertad, pese a que tenía un pedido de captura por homicidio. No obstante, ante la respuesta sobre la imposibilidad de reunir ese dinero, Caminos fue trasladado a la División Judiciales de la Unidad Regional II, con la excusa de que había sido apresado en una persecución policial tras un control vehicular de rutina.
Los policías contarán con el patrocinio de un defensor público y serán acusados por las fiscales Karina Bartocci y Georgina Pairola, ésta última de la unidad de Homicidios Dolosos y quien investiga el asesinato de Leonel Juárez, de 37 años, perpetrado el 25 de diciembre pasado.
El crimen ocurrió minutos antes de la medianoche de Navidad, cuando Leonel se encontraba con amigos en la esquina de Andrade y avenida Grandoli y fue acribillado desde una moto. Pese a que llegó con vida al hospital falleció en los primeros minutos del lunes 26.
Por ese hecho fue acusado Fernando (sobrino del legendario Pimpi Caminos, ex jefe de la barra de Newell’s) quien fue imputado en enero pasado (luego del episodio con los efectivos del Comando) y se le dictó prisión preventiva sin plazo por el delito de homicidio agravado por el uso de arma de fuego y portación de arma de uso civil.
La histórica disputa entre bandas del Fonavi del Parque del Mercado y el barrio Municipal lleva más de una década y en último año se cobró una veintena de vidas.
