Por Marcos Castro *
Todos o casi todos conocemos a alguien que transitó por el oscuro camino del consumo problemático, más comúnmente denominado adicción.
Es alarmante ver cómo cada vez más jóvenes e incluso niños se ven atrapados en esta red difícil de salir. Abusos o violencia u otro tipo de situaciones pueden llevar a las personas hasta este punto límite en el que no solamente se ven afectados ellos mismos, sino también el entorno que los rodea. Pérdida de trabajo, familias destruidas, deudas, niños huérfanos, problemas de salud, privación de la libertad y muerte pueden ser el saldo de una enfermedad que no distingue personas.
Existen diferentes asociaciones y entidades que trabajan arduamente en la prevención de estos casos. Entre estos se encuentra Hay Salida, un grupo cristiano de ayuda terapéutica que no solamente recibe personas con este tipo de conflictos sino que también trabaja con sus familiares y allegados que en la mayoría de los casos se ven desbordados y no saben cómo manejarse ante este tipo de escenarios. Osvaldo Denton junto con su esposa Lidia Barrera son sus fundadores. Hablamos con él para que nos cuente el trabajo que realizan.
—¿Cómo se formó Hay Salida?
—El grupo nació hace 15 años por una inquietud: nuestro hijo Iván no andaba bien. Aunque Lidia había estudiado para ser operadora comunitaria (el nexo entre quien tiene la problemática y los profesionales de la salud), como le pasa a muchos padres, no nos habíamos dado cuenta que en casa las cosas no estaban bien. Vimos que los padres de chicos con adicciones no sabían nada, de ahí salió el grupo para trabajar con padres y familias.
Empezaron a llegar cada vez más chicos, empezamos a crecer hasta formarnos en lo que somos ahora: un gran grupo de familias, chicos y chicas que han salido o están saliendo de esta problemática.
—¿Qué sienten llevando adelante este trabajo?
—Sentimos un verdadero llamado. Si bien a veces uno se cansa un poco de escuchar historias terribles y tantas luchas, Dios no nos hace bajar los brazos.
—¿Qué sensación les da ver a una persona recuperada?
—Esto es algo inexplicable. Alguien que vimos llegar roto, sintiendo que no valía un peso, quebrado, un alma rota y verlo bien como tantos y tantas que están y han pasado se nos alegra el corazón y se cumple la palabra que dice que nada de lo que hacemos para Dios es en vano. Así que cuando a veces estamos un poco decaídos y cansados vemos esas vidas recuperadas y se nos alienta el corazón para seguir.
—¿Un mensaje para dejar?
—Queremos proclamar que con la ayuda de Dios hay salida a esta problemática. Por supuesto que con trabajo y dedicación pero por sobre todo con su fortaleza.
De la muerte a la vida
Adrián Segovia padeció de adicciones durante más de 20 años. Hoy se encuentra recuperado y junto con su esposa María y un grupo de coordinadores colaboran en el grupo. Nos cuenta su experiencia.
—¿Cómo llegaste al grupo?
—Llegué a los 45 años por medio de un amigo recuperado. Estaba consumido, pesaba 58 kilos y no quería mirarme al espejo, me daba vergüenza. De estar bien y tener mi oficio a verme en ese estado decadente me deprimió mucho.
—¿Cómo fue tu proceso?
—Los dos primeros años fueron los más duros. El primero sobre todo, sentí el dolor de la abstinencia y el segundo un poco más aliviado.
En ese momento estaba viviendo en una casa donde se comercializaba droga, sufría maltrato y humillación. Me veían sin comida y sin un mango y me ofrecían para vender y consumir. Sin embargo, encerrado en mi habitación, abrazado a una Biblia regalada le pedía a Dios que me saque, me sane y me escuchó. Empecé a hacer trabajos, a subir de peso y la iglesia Santuario de Fe me dio un nuevo lugar para vivir.
—¿Qué estrategias utilizaste?
—Tomé las herramientas de Hay Salida. Dejé de juntarme en la esquina, de ir a los asados. Tenía idolatría por un club de fútbol y eso también me conducía al consumo. Opté por cambiar de hábitos y ámbitos. Empecé a ir donde no se consumía nada de droga y nada de alcohol.
—¿Cómo estás hoy?
—Pude acomodar mi vida y reactivar mi imprenta. Después de cinco años recuperado, cuando pensaba que tenía mi vida terminada, me volví a casar. Hoy puedo decir que se puede salir de las adicciones, que Dios existe y aliento a quien sea que lea esto a que se acerque a cualquier grupo y se deje ayudar.
Hay Salida | Días y horarios: Martes y jueves 18 hs en Bolivia 2050 / Viernes 19 hs en Deán Funes 1757 | Contactos: Adrián: 3413423255 / María: 3412100484 / Gastón: 3415077051 (Pérez)
Convenio La Cigarra – Santa Fe Más
La Cooperativa de Trabajo La Cigarra firmó por segundo año consecutivo un convenio para dictar talleres con el programa Santa Fe Más, que depende del Ministerio de Desarrollo Social de la provincia. Está orientado a jóvenes de entre 16 y 30 años con el fin de brindarles herramientas que ayuden a la inserción en el mundo del trabajo.
El desafío es grande y se lleva a cabo en tres talleres de un encuentro semanal con personas de todas las edades, quienes fueron seleccionadas por haber transitado capacitaciones relacionadas con la comunicación y el periodismo en las organizaciones sociales de las que dependen.
*Integrante de Hay Salida