Sin embargo, con el paso del tiempo y el contacto constante con diversas superficies, estas joyas pueden perder su brillo y mancharse. Pero no te preocupes, existe un truco sencillo y efectivo para devolverles su esplendor con ingredientes que podés encontrar en tu hogar.

Qué Necesitás

  • Agua tibia
  • Jabón líquido suave
  • Un cepillo de dientes de cerdas suaves
  • Un paño suave y limpio

Pasos a Seguir

  1. En un recipiente, mezcla agua tibia con unas gotas de jabón líquido suave.
  2. Sumergí tus joyas en la solución durante unos minutos.
  3. Utilizá el cepillo de dientes para frotar suavemente las zonas manchadas o con suciedad.
  4. Enjuagá las joyas con agua limpia y tibia para quitar el jabón.
  5. Secá tus joyas con un paño suave para evitar marcas de agua.

Consejos Adicionales

Para mantener tus joyas en óptimas condiciones, es recomendable:

  • Guardar las joyas en un lugar seco y separado para evitar que se rayen.
  • Evitar el contacto con productos químicos fuertes, como perfumes o productos de limpieza.
  • Limpiar tus joyas regularmente para mantener su brillo y evitar la acumulación de suciedad.

Con estos simples pasos, podrás devolver el brillo a tus joyas de oro y plata, manteniéndolas como nuevas. ¡No dejes que el tiempo apague el esplendor de tus piezas favoritas!

Lo que nunca hay que usar para limpiar los anillos de oro y plata

Es fundamental evitar el uso de productos como blanqueadores, lavandina, cloro, desengrasantes, limpiadores o antical, ya que pueden dañar tus joyas.

Cómo limpiar los anillos de oro

Para limpiar tus anillos de oro, solo necesitarás agua tibia y jabón de lavavajillas. Seguí estos pasos:

  1. Mezclá agua tibia y jabón de lavavajillas en un recipiente.
  2. Sumergí los anillos en la solución y dejalos reposar durante unos minutos.
  3. Usá un cepillo de dientes blando para frotar suavemente las joyas.
  4. Enjuagá con agua limpia y secá con un paño suave para evitar rayones.

Cómo limpiar los anillos de plata

Para los anillos de plata, especialmente los rodiados, podés seguir este sencillo truco:

  1. Humedecé un paño de algodón o franela con agua tibia y jabón de lavavajillas.
  2. Frotá suavemente las piezas con el paño para limpiar la plata.
  3. Evitá el uso de paños de papel, poliéster u otros tejidos que puedan contener fibras abrasivas.

En el caso de la plata ennegrecida, no utilices productos químicos ni limpiadores con amoniaco, ya que pueden dañarla. Si tus anillos tienen un acabado mate, usá bicarbonato con un paño suave. Sin embargo, si la pieza tiene un acabado brillante, es mejor evitar el bicarbonato para no rayarla.