Julio Grondona siempre tuvo respeto y admiración por el fútbol rosarino. Cada vez que lo consultaron al respecto, el fallecido presidente de la AFA nunca se cansó de ponderar no solamente la jerarquía de los jugadores promovidos de una cantera interminable, sino también la capacidad de los técnicos forjados en estas latitudes. Y asimismo supo mostrar acercamientos y distanciamientos con las autoridades de turno de los clubes rosarinos y del propio presidente de la Asociación Rosarina, Mario Giammaría.
En 35 años de mandato, Grondona supo estrecharle la diestra a directivos que pasaron por Newell’s y Central con adhesiones y odios, éxitos y fracasos como Víctor Vesco, Pablo Scarabino, Eduardo Gallo, Mario García Eyrea, Eduardo López, Horacio Usandizaga, Antonio Rodenas, Walther Cattáneo, Armando Botti, Juan Carlos Campagna, Juan Dalbes, Guillermo Lorente y Norberto Speciale.
Grondona mantuvo un trato particular, cuasi paternal, con Lionel Messi. Lo adoptó como un nieto preferido desde que el crack del Barcelona irrumpió con la Selección Argentina en el Mundial Sub 20 de Holanda 2005. Desde aquella época, ambos consolidaron un vínculo muy estrecho, que tuvo su punto cúlmine el reciente subcampeonato en la Copa del Mundo de Brasil 2014.
El fútbol de Rosario no sólo se caracteriza por ser proveedor permanente de jugadores y técnicos al concierto internacional en general y a la Selección Argentina en particular. Cuando Grondona asumió en la presidencia de la AFA en el 79, comenzó a trabajar con César Menotti para prolongar el ciclo que se había puesto en marcha antes de Argentina 78 y que concluyó sin gran suceso en España 82.
Cuando se cerró el proceso de Daniel Passarella en Francia 98, designó como DT de Argentina al también rosarino Marcelo Bielsa. Más allá de los resultados adversos y de la prematura eliminación en Corea-Japón 2002, Grondona respaldó el proyecto y la metodología de trabajo del Loco. Y a partir de ese espaldarazo a Bielsa, la selección olímpica consiguió la medalla de oro en los Juegos de Atenas 2004, con multitudinaria presencia de jugadores rosarinos o surgidos de la cantera local: Luciano Figueroa, Javier Mascherano, Gabriel Heinze, Cristian González, Leandro Fernández, César Delgado y Mauro Rosales.
Allá por noviembre de 2003, Grondona supo estar presente en la ceremonia por el centenario de Newell’s. En el almuerzo protocolar desarrollado en el Hotel Riviera, compartió almuerzo con Eduardo López y otros tantos dirigentes actualmente declarados personas no gratas en el club del Parque. Allí el mandamás de la AFA recordó a un equipo que lo impactó desde joven: el Newell’s del 42 que integraban René Pontoni, Rinaldo Martino y José Cantelli, entre otros.
Impulsó la designación del Coloso del Parque como subsede del Mundial Sub 20 que se celebró en 2001. Y como contrapartida, a raíz del escándalo por las entradas en aquel partido en el Gigante de Arroyito entre Argentina y Brasil por eliminatorias mundialistas (ver aparte), le dio la espalda a Rosario como uno de los escenarios de la Copa América que se disputó en 2011 en nuestro país. Y finalmente la elección recayó en el estadio de Colón de Santa Fe, lo que despertó la bronca de los rosarinos.
Newell’s y Central celebraron campeonatos bajo el extenso ciclo de Grondona en la AFA. Lo mismo que Tiro Federal, Central Córdoba y Argentino en categorías del ascenso. También Central lamentó dos descensos. Grondona ya es parte de la historia misma del fútbol rosarino en AFA.
La Selección, en Rosario
Por primera y única vez en la historia de las eliminatorias mundialistas, Julio Grondona decidió mudar a la Selección Argentina de Buenos Aires para traerla a Rosario, para el partido contra Brasil en la instancia clasificatoria al Mundial de Sudáfrica 2010. El 5 de setiembre de 2009, Rosario recibió a la Argentina en el Gigante de Arroyito. Por pedido exclusivo del entonces técnico Diego Maradona, para enfrentar a Brasil. Un acontecimiento histórico para la ciudad -más allá del posterior escándalo por las entradas-, ya que el equipo nacional nunca había jugado fuera del ámbito de Buenos Aires por eliminatorias mundialistas.
“Ha sido un padre dirigencial para nosotros”
Carlos Dávola, presidente de Tiro Federal, lamentó el fallecimiento de Julio Grondona. “Representa una pérdida enorme para la dirigencia deportiva. Se fue el directivo que cambió las estructuras del fútbol argentino. Un tipo con una personalidad avasallante y cuya palabra era determinante. Ha sido como un padre dirigencial para todos nosotros”, consideró el directivo.
Según Dávola, “la muerte de Grondona provocará un sismo en el fútbol argentino. El futuro es toda una incógnita porque nunca se pensó en una eventual sucesión en la presidencia de la AFA. Es que no existe un segundo de Grondona. En la noche anterior condujo la reunión de Comité Ejecutivo. Murió en plena actividad”, lamentó el dirigente.
Dávola destacó la iniciativa de Grondona de federalizar el fútbol nacional. “Para el fútbol de Rosario, no sólo decidió sacar a la Selección Argentina de Buenos Aires para traerla a nuestra ciudad en un partido contra Brasil por eliminatorias. También la designó subsede en el Mundial Sub 20. Y además supo federalizar toda la estructura del fútbol argentino, con la creación de los Argentino A y B, y con la construcción de estadios en distintos puntos del interior del país”.
El presidente de Tiro Federal recordó el momento en que se cruzó por primera vez con Grondona. “Lo conocí en el 98, cuando empezamos a jugar en el Argentino B. Acostumbraba a abrirles las puertas a todos los clubes de todas las categorías. Atendía de igual manera al presidente de River o Boca, o Tiro Federal. Cuando ascendimos a primera división, nos dio una cálida bienvenida”, manifestó.
Dávola relató el momento que más lo marcó al lado de Grondona. “Tuve la oportunidad de ser representante de los clubes del interior de la B Nacional, en el Comité Ejecutivo. ¿El momento más impactante de mi relación dirigencial con Grondona? Aquella noche en el predio de Ezeiza, cuando se decidió que la televisación de los partidos del fútbol argentino pase de TyC Sports a la TV Pública. Recuerdo que fue una jornada intensa e inolvidable, para la modificación de una estructura económica cuyos cambios todavía no terminaron”.
“Coincidencias y peleas pero con respeto”
Mario Gianmaría, presidente de la Asociación Rosarina de Fútbol, fue uno de los directivos que más tiempo compartió con el fallecido Julio Grondona. “Empezamos a entablar relación a mediados del 76, cuando integrábamos la comisión de estadios del Mundial 78. Por entonces yo era el tesorero de la Rosarina y él estaba en la presidencia de Independiente”, rememoró.
“Se fue un dirigente fuerte, con personalidad, que en el 79 ganó una dura pulseada por la presidencia de la AFA. No sé si teníamos una amistad, pero sí una relación de gran cordialidad. En los últimos años ha sido muy cuestionado, aunque siempre se mostró como un directivo astuto y negociador”, señaló Giammaría.
El titular de la Asociación Rosarina reconoció que “el fallecimiento su esposa Nélida lo golpeó muy fuerte a Don Julio. Fue una circunstancia de vida que no pudo superar. Yo lo recuerdo como el dirigente que logró posicionar al fútbol argentino entre los mejores. No por nada recibió el cargo de vicepresidente senior de la Fifa y estuvo en la comisión de finanzas. Yo siempre le preguntaba por qué nunca quiso estudiar otros idiomas, a lo que me respondió: ‘Yo hablo el idioma del fútbol mejor que nadie’. No tuve nada más que decirle”.
Giammaría admitió que Grondona lo convenció “para renovar el mandato” en la presidencia de la Asociación Rosarina. “Voy a quedarme dos años más para formar a los próximos dirigentes. Con Julio nos íbamos a juntar la próxima semana. Estaba haciendo todo lo posible para que (Alejandro) Sabella lo acompañara hasta el final de su mandato. Hemos tenido muchas coincidencias y muchas peleas, pero siempre con respeto”.
“Grondona supo tener muchos contactos a nivel político y gremial. Quizás demasiados para mi gusto. El escenario del fútbol argentino se fue modificando por presiones e intereses de intendentes, gobernadores, funcionarios, ministros, senadores y diputados, que apoyan a los clubes del interior”, consideró.
“Rosario siempre proveyó jugadores y técnicos a la Selección: Balbo, Sensini, Chamot, Kily González, Batistuta, Franco, Menotti, Bielsa. Somos la liga más importante del país y nunca le trajimos problemas a Grondona”, concluyó Giammaría.
Capacidad increíble (Por Guillermo Lorente, presidente de Newell’s)
Fue algo inesperado, que nos tomó por sorpresa y nos golpeó. Es un momento de mucha consternación para todos, porque se fue un dirigente de raza. Julio era un dirigente con una capacidad increíble y no por casualidad estuvo tanto tiempo al frente de AFA. Más allá de poder coincidir o no en sus formas, estar 35 años al frente de un fútbol como el nuestro no es casualidad. Ahora nos queda una responsabilidad muy grande para cubrir ese vacío, pero creo que es algo para debatir más adelante, hoy es un momento para que estemos acompañándolo. Mi deseo es que descanse en paz.
Comunicado oficial. Newell’s lamenta el fallecimiento de Julio Grondona, presidente de la Asociación del Fútbol Argentino, y envía condolencias a su familia.
Aprendí de Don Julio (Por Norberto Speciale, presidente de Central)
Lo poco que puedo saber del mundo del fútbol lo aprendí de Grondona. Desde el primer día que llegué a la presidencia de Central y al Comité Ejecutivo de AFA, siempre tuve su apoyo. Fui varias veces a su casa a charlar de fútbol y compartimos muchos momentos, dónde hablamos del fútbol de AFA y de la Fifa. Ahora, los dirigentes del fútbol argentino tenemos la responsabilidad de llevar adelante esta sucesión de la presidencia de AFA de la mejor manera, como homenaje.
Comunicado oficial. Rosario Central lamenta profundamente la desaparición del presidente de la AFA y vicepresidente senior de la Fifa, Julio Humberto Grondona y acompaña a toda su familia en este doloroso momento.