Un informe de la Procuraduría de Narcocriminalidad (Procunar) advirtió que los principales capos narcos detenidos en el país, entre ellos Marco Antonio Estrada Gonzáles o Ariel Máximo “Guille” Cantero, continúan ejerciendo actividades delictivas desde sus lugares de detención mediante la utilización de teléfonos, y propuso la creación de una mesa de trabajo interdisciplinaria para elaborar un plan que prohíba la utilización de celulares en casos puntuales de presos por delitos vinculados al crimen organizado.
El informe, al que tuvo acceso Télam, fue presentado por el titular de la Procunar, Diego Iglesias, al Procurador de la Nación, Eduardo Casal, y menciona 20 casos de capos narcos, la mayoría de ellos ya condenados, en los cuales se detectó que aún coordinan desde cárceles federales y provinciales de todo el país “maniobras de tráfico, transporte y comercialización de estupefacientes y de otros delitos vinculados, ya sea lavado de activos, homicidios, secuestros extorsivos o amenazas”.
“El objetivo de este trabajo es exponer los problemas que este fenómeno presenta para la persecución penal desde la óptica del Ministerio Público Fiscal y poner en conocimiento de las autoridades y otros organismos involucrados, la situación vinculada con la planificación, coordinación y ejecución de operaciones narcocriminales, como así de otros delitos relacionados, desde el interior de las unidades carcelarias”, dice el informe.
Según el relevamiento realizado por la Procunar, “esa situación se ha identificado en reiteradas oportunidades, en distintas jurisdicciones y en varias cárceles del país -tanto federales como provinciales-, evidenciando que el problema excede las circunstancias específicas de una institución en particular, o de las características de determinada organización”.
El organismo advirtió en los casos relevados la presencia de personas en el exterior de las cárceles que llevan a cabo “actividades ilícitas” que son organizadas por “eslabones superiores de la organización delictiva” que se encuentran privados de la libertad.
“En la mayoría de los casos, la comunicación con las personas del exterior se llevó a cabo a través de dispositivos de telefonía celular, ya sea de uso individual como también compartido entre diversas personas detenidas”, dice el informe de unas 20 páginas.
En el escrito, se mencionan los casos de el capo narco Marcos Estrada Gonzáles, quien comandó la venta de drogas durante años en la villa 1-11-14 del Bajo Flores y actualmente se encuentra detenido en la cárcel del Marcos Paz, o del jefe de la narco banda Los Monos, Guille Cantero, de la época en la que estuvo alojado en el penal de Piñero, en Santa Fe.
También los casos de Mario Segovia, más conocido como “El Rey de la Efedrina”, detenido en el Penal de Ezeiza; el de Néstor Fabián Rojas, también detenido en Ezeiza y desde donde manejaba lo que se denominó el Primer Comando de Frontera para dedicarse al tráfico ilícito de drogas desde Paraguay, vía Misiones; o Carlos Alberto Bareiro, condenado por la causa narco de Itatí, quien desde la Unidad Penal 7 de Chaco seguía liderando la venta de drogas.
“Se propone la conformación de una mesa de trabajo que convoque a distintas áreas del MPF con incidencia en la materia y a otros organismos vinculados con la temática, para intercambiar diagnósticos, sugerencias y establecer un plan de política criminal que permita el abordaje de este fenómeno criminal específico”, concluye el escrito.