Las empresas estatales Aerolíneas Argentinas y Austral recibirán este año más subsidios que en 2018, cuando necesitó 200 millones de dólares, y reconoció que a ambas líneas aéreas les resulta “muy difícil” lograr rentabilidad por la “gran competencia” que hay en ese mercado. Lo paradigmático del caso es que fue el propio gobierno nacional quién fomentó la llegada de low cost, le otorgó muchas de las rutas de Aerolíneas a empresas privadas y le quitó los topes mínimos a los precios de los boletos.
“Este año va a ser peor que el año pasado, todavía no sabemos cuánto. Los aportes en subsidios fueron 200 millones de dólares en 2018 y este año van a ser más”, sostuvo el presidente de Aerolíneas, Luis Malvido.
El funcionario comentó en conferencia de prensa que “hay una gran competencia que en el mercado local, fuertemente impulsada por Latam, que está haciendo bajas de precios muy agresivas. Eso está haciendo que no dependa tanto de la eficiencia de cada aerolínea. A esos precios es muy difícil hacer rentables las rutas”.
“Latam está siendo muy agresiva en la política de precios. Pero recuerden que las low cost entraron con pasajes a un peso. Es difícil decir quién empezó, por qué y cuál es el cálculo racional detrás. Además, en este momento Latam tiene una participación de mercado apenas superior a algunas de las low cost”, añadió.
Los argumentos que utiliza el presidente de Aerolíneas para justificar el mal desempeño de la aerolínea de bandera fueron consecuencia de las políticas del gobierno nacional al que pertenece.
“Son precios que nunca se habían visto, antes había promociones que duraban poco tiempo, pero ahora estamos viendo que la norma es que un pasaje a Miami cueste 500 dólares, cuando hace dos años se pagaba 1.000 dólares”, enfatizó, según publicó un matutino porteño.