La venta ilegal callejera en Rosario aumentó un 6,2 por ciento el último trimestre de 2014 con relación al penúltimo del mismo año, cifra que la coloca por debajo de Buenos Aires, Salta y Tucumán, en cuyos casos el alza osciló entre el 14 y el 32,7 por ciento. El informe revela que las calles más pobladas de comercio irregular fueron San Luis al 1300, San Martín al 1000 y Córdoba al 1200, entre otras, mientras que los rubros salientes a la hora de la oferta fueron los de indumentaria y calzado.
Los datos fueron dados a conocer por la Cámara Argentina de Comercio (CAC) tras un relevamiento realizado junto a distintas asociaciones del país en nueve de los centros urbanos más poblados como lo son Buenos Aires, Rosario, Salta, Neuquén, Posadas, Mendoza, Paraná, Santa Fe y San Miguel de Tucumán.
El trabajo de campo en Rosario estuvo a cargo de la Federación Gremial del Comercio e Industria de Rosario (Fecoi), entidad que dio a conocer que durante el último trimestre del año pasado se detectó un promedio de 97 puestos fuera de regla en las calles de la ciudad, mostrando que durante octubre se relevaron 83 mientras que en diciembre la cantidad detectada aumentó a 104.
Las cuadras afectadas
Entre las cuadras más afectadas por la comercialización ilegal se encontró que San Luis al 1300 y San Martín al 1000 tuvieron un promedio de 10,3 puestos cada una; San Luis al 1200 mostró un promedio de 9,7 puestos por cuadra, seguida por San Martín al 900, Córdoba al 1100 y Córdoba 1200, San Luis al 1100 y 1400.
Los más buscados
Según el relevamiento realizado por la Cámara, los rubros que se comercializan en la calle son alimentos y bebidas; indumentaria y calzado; óptica, fotografía, relojería y joyería, y juguetería y esparcimiento.
En tanto, en Rosario ocuparon las primeras posiciones entre los más activos, los sectores de indumentaria y calzado, los cuales representaron un 29,6 por ciento. Por su parte, los artículos de juguetería y esparcimiento –donde se incluye la venta de CD y DVD falsificados– ocupó el segundo lugar, con una incidencia de 22,5 por ciento, mientras que a otros correspondió el tercer lugar, con un 12,5 por ciento.
“Falta control municipal”
Los comerciantes de la ciudad ven con temor el crecimiento sostenido de la venta ilegal callejera y atribuyen ese aumento, en mayor medida, a la falta de controles rigurosos por parte del municipio. Esta postura es sostenida por el titular de la Asociación Empleados de Comercio (AEC), Ricardo Diab, quien se mostró molesto por la falta de atención con aquellos comerciantes que cumplen con la norma.
“El comercio tiene que pagar todos los impuestos, tributos, contribuciones y responsabilidades. La venta ilegal no tiene compromisos. Hasta el negocio más chico debe tener un postnet porque si no es multado. Si bien entendemos que hay gente que necesita comprar más barato, si todos compran mercadería ilegal la gente que trabaja en comercios tendrá que salir a buscar trabajo. Por eso, si hay un control, que sea igual para todos”, sentenció.
Sumado a ello, reveló que la mayoría de los vendedores callejeros se abastece de mercadería producida a partir de una actividad ilegal, es decir, “en talleres clandestinos con empleados en negro”. “En la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came) hay preocupación por el crecimiento continuo de la actividad ilegal. Si bien en Rosario es menor tampoco queremos que recrudezca”, agregó Diab.
El trabajo de relevamiento de puestos ambulantes en la ciudad es encarado, desde hace ya cuatro años, por la Federación Gremial del Comercio e Industria (Fecoi), desde donde expresaron una postura que va en esa misma dirección. Para su presidente, Edgardo Moschitta, el crecimiento de esta actividad ilegal, que “tiene un impacto negativo muy fuerte sobre los comercios”, se da como consecuencia de la escasez de oferta de trabajo formal. Asimismo, denunció que detrás del suministro de la mercadería existe un grupo organizado que aprovecha la falta de control, sobre todo en los días de huelgas municipales, para llenar las calles de manteros.
“Este crecimiento se viene dando con los años; y lo vemos con mucha preocupación porque cuando uno compra algo en un puesto (callejero) deja de comprarlo en un comercio. Además, estos productos justifican sus bajos precios con mercadería caracterizada por la falsificación de marcas, confeccionada en lugares informales u obtenida a partir del contrabando”, concluyó.
En el país, creció 28%
En el cuarto trimestre de 2014, la venta ilegal a nivel nacional (considerando el promedio de mediciones mensuales en nueve importantes ciudades de Argentina) registró una suba interanual de 28,3 por ciento –esto es, respecto al cuarto trimestre de 2013–, y de 8,5 por ciento comparado al tercer trimestre de 2014. Es lo que se desprende del “Informe de venta ilegal callejera en la República Argentina”, elaborado por la Cámara Argentina de Comercio, y que cubre actualmente las ciudades de Buenos Aires, Rosario, Salta, Neuquén, Posadas, Mendoza, Paraná, Santa Fe y San Miguel de Tucumán.
La suba interanual (comparado los datos del cuarto trimestre de 2014 con los del cuarto trimestre de 2013) estuvo explicada por aumentos en Buenos Aires (70,5 por ciento), Rosario (4,6 por ciento), Neuquén (13,3 por ciento), Posadas (15,5 por ciento) y un ligero aumento en Mendoza. Por otra parte, Paraná y Santa Fe registraron bajas, de 5,6 y 8,6 por ciento, respectivamente, mientras que en Salta no hubo cambios.
Por otra parte, la suba intertrimestral (comparando los datos del cuarto trimestre de 2014 con los del tercer trimestre de 2014) fue el resultado de aumentos en la venta ilegal en Buenos Aires (17,6 por ciento); Rosario (6,2 por ciento), Salta (14 por ciento), Tucumán (32,7 por ciento) y Mendoza (aunque en este caso el aumento fue de un punto).
