En mayo de este año el proyecto de Ley Nacional que busca garantizar la participación de mujeres en festivales de música había tenido su dictamen para ser tratado en la Cámara Baja tras haber obtenido media sanción en Senadores. Desde entonces la espera fue ardua y aún así hubo cinco votos negativos y seis abstenciones. De todas formas, las músicas del país celebran este logro gracias al voto de 133 diputados, además de la militancia de 700 artistas del país y medios de comunicación en general. La ley de cupo femenino en festivales es un hecho: los eventos musicales deberán contar con un mínimo del 30 por ciento de artistas mujeres en su programación.
La iniciativa fue impulsada por Anabel Fernández Sagasti y en la noche del miércoles lo festejó en sus redes y declaró: «Fue a partir de la organización de las mujeres músicas que se elabora el proyecto que presentamos, y este hecho no es un acto de menor importancia. No sólo porque es un proyecto de ley que tiene como característica principal la legítima demanda y la representatividad que todos los que tratamos en este recinto deberían tener, sino que además es reflejo de la historia de vida y lucha de muchas mujeres que en distintas épocas y puntos del país, vivieron y sintieron lo mismo».
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Según indica el proyecto, no sólo se propone visibilizar a las músicas sino también a las mujeres y disidencias que se encargan del armado de escenarios, las que hacen puesta de luces, las sonidistas y más.
El escenario actual es preocupante: según comunicó el Instituto Nacional de la Música (INAMU), el porcentaje promedio de mujeres en los escenarios es inferior al 15 por ciento.
Por su parte, la vicegobernadora electa de Santa Fe y actual diputada nacional, Alejandra Rodenas, había manifestado su alegría en octubre, cuando el proyecto de ley cursaba su último paso: “Por más mujeres en los escenarios. Con mucha alegría quiero contarles que logramos, por unanimidad, dictamen favorable en Diputados para que se debata en el recinto el Proyecto de Ley de Cupo de mujeres en eventos musicales”.
“El deseo del colectivo de mujeres y diversidad es tan motivador y multiplicador que permitió que hoy estemos frente a un nuevo paradigma en la participación de las mujeres en la música”, escribió.
El precedente más mediático del tema fueron las declaraciones del productor cordobés José Palazzo, que había cuestionado el proyecto apoyado por músicas argentinas por considerar que “no hay suficientes mujeres con talento” como para cubrir ese cupo.
El proyecto afirma que de acuerdo a los datos demográficos relevados por el Registro Nacional Único de Músicos del Instituto Nacional de la Música (que al 22 de junio de 2018 cuenta con 37.346 artistas registrados), el promedio indica un 80 por ciento de músicos y tan sólo un 20 por ciento de mujeres, “manteniéndose la misma diferencia de porcentajes en los aspirantes a subsidios de dicho organismo”, según comentó Celsa Mel Gowland una de las impulsoras del proyecto. “Cada día que pasa sin una ley de cupo femenino en escenarios, es una oportunidad menos expresiva y laboral para las músicas argentinas”, había dicho tras la media sanción en el Senado.
En consonancia con este debate nacional el Colectivo de Mujeres Músicas Rosario logró que la semana pasada se apruebe una política similar en el Concejo Municipal. Pero hay dos diferencias. Una que la nacional es obligatoria (y conlleva sanciones) y la municipal es de fomento. La segunda diferencia es el porcentaje. La local busca que la mitad de la presencia en escenario sea de mujeres y la nacional de un 30 por ciento.
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