El biólogo molecular e investigador del Conicet, Alberto Kornblihtt, sostuvo que el eventual «cierre o privatización» de ese organismo público de ciencia y tecnología «sería un escándalo internacional», y afirmó que ya más de 1.000 científicos argentinos radicados en el exterior firmaron un pronunciamiento advirtiendo sobre las consecuencias que tendría una decisión política en ese sentido a partir de 2024.
«Si cerraran o privatizaran el Conicet sería un escándalo internacional», sostuvo Kornblihtt para quien ese organismo «es la institución pública en ciencia y técnica más prestigiosa y productiva de América Latina».
Consultado por el programa «Desiguales», que emite la Televisión Pública, Kornblihtt dijo que «ya hay repercusiones» internacionales en torno a los dichos del candidato presidencial por La Libertad Avanza, Javier Milei, quien al comparar de modo erróneo el Conicet con la NASA -su homólogo en Argentina es la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE)- lo calificó de «improductivo» y lanzó que «hay que cerrarlo».
«Está circulando una declaración de más de 1000 argentinos que hacen ciencia fuera del país, de todos los colores políticos, seguramente no el de Milei, que está en este momento juntando aún más firmas» para pronunciarse contra la iniciativa del libertario, dijo Kornblihtt.
«La ciencia y tecnología son imprescindibles para el país -agregó el científico-. No existe país en el mundo que no tenga inversión estatal en ambas, incluso en niveles más altos y con más personas que Argentina».
«Como ciudadano -dijo el científico-, tengo mucha desazón y miedo de esta avalancha de votos a Milei, que lamentablemente representa la rebeldía, que ha sido abandonada por sectores del progresismo e incluso del peronismo».
Y agregó: » El progresismo se ha vuelto un poco conservador y el peronismo ha perdido su carácter bastardo, que para mí es esencial».
«Si hay un momento en el cual tendría que haber rebeldía contra el FMI, es ahora. Porque si no, la rebeldía, por otras razones y con un delirante que, por ejemplo, es capaz de decir que si los vecinos de un municipio necesitan asfaltar su cuadra, que la asfalten ellos porque otros no la usan. A ese extremo de individualismo hemos llegado», reflexionó Kornblihtt ante la Televisión Pública.
«Sin desmerecer a quienes lo han votado, el peligro de que la Nación quede en manos de una persona como esta es muy grande. Argentina nunca pasó por algo así, cuando la salida que se propone es la disolución de una sociedad, en la que desaparecerían nociones como las del prójimo», concluyó.