Hace rato pasó la medianoche en España y Alejandro Bortolussi deja el Palacio de los Deportes de Granada agotado pero exultante. Su equipo acaba de clasificarse para disputar la final de la Leb Oro por el ascenso a la Liga Endesa de España tras ganarle 72 a 68 a La Coruña en tercer juego. Esta vez no tuvo tantos minutos y tampoco anotó, pero el rosarino piensa en modo colectivo, hace rato la mentalidad dejó de ser “yo” para pasar a “nosotros” y no es casualidad que en la planilla lleve la C de capitán junto a su apellido.
“Vamoooos. El equipo tuvo unos huevos tremendos hoy. Ellos eran superiores en lo físico y este era un tercer partido con mucho desgaste, pero lo sacamos bien”, le cuenta el ex Náutico a El Ciudadano en el silencio que gana la trasnoche de una de las ciudades más bonitas de España. “Estuvimos muy bien en defensa y en los momentos calientes del partido el equipo estuvo enchufado. Hicimos una muy buena temporada y eso nos pone muy contentos, terminamos en primer lugar de la fase regular y eso nos brinda el factor cancha en todas las eliminatorias”, analiza el rosarino, quien desde sus jóvenes 15 años juega en España en una aventura que se inició en las formativas de Málaga y que recorrió elencos y categorías del básquet de ese país, pero con tres estadías largas y afectuosas, Málaga primero, Granada en esta última etapa. Y en el medio: Lugo, que será el rival en esta final. Toda una señal del destino.
“De mi época en Breogan Lugo queda sólo el delegado (risas). Son los grandes candidatos y favoritos desde el inicio de la temporada y ganaron la Copa Princesa a mitad de temporada. Sabemos que es difícil, pero el equipo está muy bien de la cabeza y vamos por todo”, resumen Borto, emblema del equipo y de la ciudad.
Granada salió segundo en la primera etapa clasificatoria de la competencia con marca de 12 ganados y 6 perdidos y en la fase campeonato terminó primero con racha de 13 y 5 pero gracias a la diferencia de puntos justamente ante Lugo. Breogán ganó 85 a 78 el primer choque entre ellos, pero Granada se impuso 97 a 80 en la vuelta. En cuartos de final,
Es tiempo de descansar, reunir energías y pensar en lo que viene. Granada está en la final que buscaba desde hace tiempo y Bortolussi quiere terminar de completar una foja de servicio intachable con el equipo al que llegó cuando estaba allí abajo en el ascenso español y al que ayudó a devolverla buena parte de su gloria.
