Ignacio Ortiz/Télam
La Secretaría de Energía avanza en negociaciones con Alemania para el financiamiento de la construcción de líneas de alta tensión por unos US$ 1.700 millones, que forman parte del Master Plan del gobierno nacional, y que en el corto plazo resultarán fundamentales para abastecer proyectos de litio y cobre, y facilitar el incremento de energías renovables.
El diálogo entre los dos países tiene como eje potenciar una agenda bilateral de nueva generación con foco en hidrógeno y transición energética, lo cual incluye la posibilidad de que Alemania colabore en financiar el desarrollo del hidrógeno verde a través de una planta experimental en el país, así como el apoyo en obras hidroeléctricas.
La posibilidad de que Alemania participe de las obras vinculadas a la cartera de proyectos de transición energética permitiría acceder a líneas con garantías soberanas para créditos a tasas muy inferiores del mercado, a las que la Argentina no podría acceder actualmente.
La Argentina desarrolló un Plan Nacional de Expansión del Transporte Eléctrico 2035 con un conjunto de obras prioritarias de mediano y largo plazo, por un monto total de inversión superior a los US$ 9.000 millones.
Se trata de 5.000 kilómetros de líneas de alta tensión, de las cuales las obras de corto plazo demandarán unos US$ 3.000 millones y dentro de lo cual el interés alemán por cinco tendidos que aliviarían la demanda de la red representan unos US$ 1.700 millones, de acuerdo a estimaciones oficiales.
En este sentido, ante las limitantes que tiene el sistema eléctrico en sus líneas de transporte, las contrapartes alemanas vienen demostrando interés en cinco líneas de transporte de alta tensión de 500kv que podrían ser financiadas por el gobierno de aquel país, con tecnología de empresas alemanas.
Las obras priorizadas forman parte del Master Plan que definió el gobierno nacional para el corto plazo, y cuya ejecución es fundamental para la explotación del litio y el cobre y para el incremento de la energía renovable en la matriz nacional.
Además del interés alemán en inversiones en hidrógeno bajo en emisiones y la participación en grandes obras de generación hidroeléctrica, también se focaliza en la transferencia tecnológica para la producción de litio en la Argentina, con miras a dotar de valor agregado al desarrollo minero.
Además, se destaca la potencialidad de la formación de gas y petróleo no convencional de Vaca Muerta, los avances del Gasoducto Presidente Néstor Kirchner tramo I y la necesidad de financiamiento del tramo II, imprescindible para lograr el autoabastecimiento y saldos exportables.
La Secretaria de Energía, Flavia Royon, explicó en declaraciones a radio Télam que ambos países vienen «trabajando y profundizando sus diálogos, en vista de que la Argentina tiene un gran potencial de ser un partner energético de Alemania».
«El potencial energético del país va mucho más allá del GNL y del gas, sino también en energías renovables e hidrógeno en el marco de colaborar con Argentina en la transición energética y posicionarnos en un futuro como proveedor de hidrógeno, así como también reforzar alianzas en materia de minerales críticos», detalló la funcionaria.
En este contexto se desenvolvió la reciente visita que Royon realizó a Alemania, en ocasión de participar del «Berlin Energy Transition Dialogue» que reunió a referentes de todo el mundo para intercambiar experiencias sobre el desarrollo energético global.
En este marco la delegación presentó el Masterplan de líneas de transporte eléctrico, considerada una respuesta adecuada a la actual limitante de infraestructura para que Argentina pueda incorporar más proyectos de energías renovables, segmento en el que es reconocida por la calidad de vientos en el sur del país y la radiación solar en el norte.
Este potencial a aprovechar se suma a la energía hidroeléctrica que posiciona a la Argentina como un país de un gran potencial de generación de energías renovables escalables.
Para este desarrollo, el diálogo bilateral empieza a centrarse en las posibilidades de financiamiento alemán para la construcción de 5 líneas estratégicas de alta tensión, de 500 kv.
La primera de las obras analizadas es la Línea de Extra Alta Tensión (LEAT) de 500 kv Chaparro – Antofagasta de la Sierra – Puna – Cobos (Jujuy, Salta, Catamarca y La Rioja), que tiene un presupuesto de obra estimado en US$ 705 millones.
Las fuentes oficiales consultadas sobre los proyectos explicaron que este tendido mejorará la confiabilidad de abastecimiento de demanda de Catamarca, posibilitando a su vez el desarrollo de los proyectos mineros en distinta etapa de avance.
La segunda línea Rodeo – Chaparro – Mining Project José María (La Rioja, San Juan) tiene un monto de obra estimado en US$ 344 millones, y conformará un nuevo sistema en 500 kV que además incluirá la demanda de nuevos proyectos mineros en esa zona, con la posibilidad de evacuar futuros proyectos de generación de energía renovables.
Comprende a un total de 194 km de LEAT 500 kV, para la interconexión en el ámbito geográfico de la provincia de San Juan, entre la futura ET Rodeo de 500/132 kV y la Nueva ET Chaparro, de 500/220 kV.
Otra de las obras de importancia observadas es la Estación Transformadora Comodoro Rivadavia Oeste de 500/132 kV-450 MVA (Chubut), que demandaría una inversión de US$ 92.3 millones para mejorar el abastecimiento del área y la confiabilidad ante contingencias en la red.
Esta obra permite la inyección de generación renovable, y es considerada clave para la instalación de capacitores serie en el corredor patagónico de 500 kV y para la duplicación prevista del corredor para atender la demanda de despacho.
La cuarta obra que tiene el interés alemán es la línea de 500 kV Chaparro – La Rioja Sur (La Rioja, San Juan) con un prespuesto estimado de US$ 303 millones.
La línea de unos 308 kilómetros de extensión permitirá cerrar un anillo en 500 kV y además aumentar la capacidad de transmisión necesaria para ingreso de generación renovable en regiones Noroeste y Cuyo.
Finalmente se analiza la viabilidad de la línea de 500kv Choele Choel – Puerto Madryn (Río Negro, Chubut) por unos US$ 234 millones, cuya realización permitirá disponer de una segunda terna de 500 kV por la zona norte de la Patagonia,
El tendido de unos 350 kilómetros permitirá satisfacer la demanda y con posibles ampliaciones hacia la zona de San Antonio Oeste y Viedma.