Varias detonaciones, a partir de las 3.30 de este miércoles, sacudieron la tranquilidad de los habitantes de la ciudad de San Nicolás, a la vera del río Paraná en el norte de la provincia de Buenos Aires. Fue por el colapso violento de un reactor para síntesis del herbicida atrazina en la planta de la empresa de agroquímicos Atanor, ubicada en la calle Rivadavia entre Pombo y Ponce de León.
La compañía emitió un comunicado en el que afirma que hubo un incremento de presión en el proceso de síntesis química de atrazina «que generó la ruptura de la tapa del reactor afectado al proceso». El incidente, continúa el texto, «dio origen a un incendio en el sector de aminación de la planta, que requirió la intervención de los bomberos de San Nicolás y Ramallo, quienes prontamente pudieron controlar el foco”.
El siniestro provocó heridas al operario Julio César Corbalán, quien fue atendido de urgencia tras ser alcanzado por el derrame de ácidos. “Se encuentra internado en el Hospital Interzonal General de Agudos de San Felipe”, informaron fuentes oficiales.
Según el informe de una consultora que publica la página del Ministerio de Ambiente bonaerense, la planta de Atanor es la única productora y formuladora de atrazina del Mercosur. Además, se sintetizan humectantes y se formulan herbicidas a base de Ácido 2,4-D, Ácido 2,4-DB, Éster Etilhexílico del Ácido 2,4-D, Ésteres Butílicos de 2,4-DB, MCPA, Dicamba, Imazetapir, SMetolacloro, Fomesafen, Cletodim e insecticidas.
Además de la afectación directa a un trabajador de la planta, la explosión pone envilo a toda la comunidad. “Hay mucho humo, sin luz y un olor muy tóxico”, publicó en redes sociales un vecino. Otro relató brevemente la traumática experiencia: “No se dan una idea lo que fue correr a la madrugada con eso tóxico en el aire los ojos hinchados llorosos se cortaba la respiración, un asco”.
La firma aseguró que «se encuentra abocada a la realización de tareas de limpieza de la planta e inmediaciones junto con el Comité Organizado ante Emergencias de San Nicolás y la firma Restec, especialista en la atención de emergencias tecnológicas”. Y admitió que «la liberación brusca de presión generó una emanación de gases propios del proceso productivo y luego, por el incendio, gases de combustión. “Las consecuencias esperables son irritación ocular y de vías aéreas superiores”, atenuó Atanor el impacto del siniestro.
La atrazina se descompone cuando se calienta intensamente, produciendo humos tóxicos entre los cuales figuran el cloruro de hidrógeno y óxidos de nitrógeno.
En la investigación del caso interviene en principio la Unidad Fiscal 14 de San Nicolás. A la vez, fue informado el Ministerio de Ambiente de la provincia de Buenos Aires y las autoridades de contralor municipales.
Las autoridades locales recomendaron evitar circular por las inmediaciones de la planta y permanecer dentro de los hogares para evitar complicaciones en la salud, ya que los productos expulsados son altamente tóxicos.
No es la primera vez que Atanor es noticia por un siniestro en su planta de San Nicolás. En noviembre de 2016 hubo otra explosión que generó una densa columna de humo negro y obligó alos Bomberos a un trabajo de varias horas para controlar el fuego desatado en un depósito de bidones plásticos.
Qué es la atrazina
La atrazina, 2-cloro-4-(etilamina)-6-(isopropilamina)-1,3,5-triazina, es un compuesto químico utilizado como herbicida artificial para controlar malezas en la agricultura interfiriendo en el transporte de electrones durante el proceso de la fotosíntesis.
Las triazinas son el segundo grupo de herbicidas más usado en Estados Unidos, pero su uso es material de controversia ya que produce efectos nocivos en especies a las que no va dirigida, como los anfibios a causa de la contaminación de las aguas, o en el ser humano.
La sustancia se descompone cuando se calienta intensamente, produciendo humos tóxicos, incluyendo cloruro de hidrógeno y óxidos de nitrógeno.
Un estudio epidemiológico a larga escala realizado en Francia entre 2002 y 2006 por el Inserm (Institut national de la santé et de la recherche médicale) sobre 3500 mujeres a principios de su embarazo “puso en evidencia que las mujeres con trazas de atrazina en la orina tenían un 70% de probabilidades suplementarias de dar a luz un bebe con deficiencia de circunferencia craniana». Esto tiene como consecuencia un déficit en el desarrollo neurocognitivo del recién nacido. Además, se demostró que hay un riesgo suplementario del 50% de dar a luz a un bebe con déficit de peso.
El biólogo Tyrone Hayes de la universidad de Berkeley en California es una referencia mundial en el sector de la investigación del impacto de los pesticidas sobre la salud. Junto con su equipo obtuvo los mismos resultados que los franceses sobre la potencialidad de la molécula en mujeres que cursan un embarazo. En 2007, publicó un reporte en el cual demuestra que la atrazina es la causa potencial de ciertos tipos de cáncer, como el de próstata o el de seno. Esta molécula también es conocida por tener efectos de epimutacion (cambio en la estructura química del ADN que no altera su secuencia de codificación).
La atrazina fue inventada por Geigy en 1958. Syngenta es hoy el principal productor de la controvertida molécula.