“Durante el fin de semana podría haber escasez de nafta en la ciudad”. Así lo aseguró el titular de la Federación Argentina de Expendedores de Nafta del Interior (Faeni), Daniel Giribone, pese a que anoche, al menos YPF salió a aclarar a través de un comunicado que mantiene “el 100%” de su provisión en todo el país.
Desde Faeni denunciaron que no se cumplen los cupos de combustibles pactados entre estaciones de servicio y petroleras. Apuntan al aumento de precios del producto de las petroleras y la falta de regulación del gobierno nacional. En tanto, el Sindicato de Empleados de Estaciones de Servicios se mostró preocupado por la negativa repercusión que tendría la falta de combustible en los trabajadores.
El fenómeno, que ahora toma notoriedad a partir del faltante en Capital Federal, es conocido por la Faeni. En diálogo con El Ciudadano, Daniel Giribone aseguró que las petroleras están restringiendo los cupos pactados con las estaciones de servicio. “Por ejemplo, quienes normalmente recibían un cupo de 400 o 500 mil litros están recibiendo sólo 250 mil litros. La gente ve que falta y se siente hace bastante. Como siempre, esperamos que sea noticia en Buenos Aires para que algo cambie. Acá, en el interior, hace rato que lo venimos padeciendo”, aseveró. De acuerdo con Giribone, la delicada situación se produce no sólo por la rigurosidad con respecto a la distribución de cupos sino también a un aumento en la demanda de combustibles pesado, como diésel y gasoil, que por razones estacionales –época de cosecha en el interior– se elevan.
En Buenos Aires, los empleados de surtidores prevén además tomar medidas de fuerza por reclamos de recomposición salarial de un 30 por ciento. En diálogo con El Ciudadano, el secretario general del Sindicato de Empleados de Estaciones de Servicios de Rosario, Ismael Marcón, sostuvo que a nivel local “ya está solucionado el problema salarial”. Sin embargo, y en sintonía con el titular de Faeni, Marcón se mostró preocupado por el faltante de combustible. “Se ha ampliado desde los combustibles más pesados como son el gasoil y el diésel a las naftas. Ya estamos empezando a tener problemas en los surtidores. Hay cierta incertidumbre porque con el abastecimiento se resiente la realidad del trabajador de estaciones de servicio”. Según el gremialista, el sindicato está atento dado que teme “que se tomen medidas, tales como las vacaciones anticipadas o las suspensiones”.
En busca de un horizonte de solución al conflicto, Giribone resumió: “Creemos que el gobierno tiene que tomar cartas en el asunto, porque tenemos congelado el precio en el surtidor y la distribución mientras que las petroleras suben sus precios, lo que no sólo complica el expendio sino hace poco rentable la actividad”.