La investigación que descubrió a un falso farmacéutico a mediados de este mes cuando intentó pasar casi 15.0000 dosis de éxtasis en la provincia de Formosa tuvo un nuevo capítulo este viernes cuando personal de la Gendarmería Nacional Argentina (GNA) llevó adelante dos allanamientos en dos departamentos ubicados en el coqueto Puerto Madero de la ciudad de Buenos Aires.
De acuerdo con voceros del Ministerio de Seguridad de la nación, indicó que la droga proveniente de China era ingresada al país desde Paraguay hacia la provincia de Entre Ríos, lo que llevó a los nuevos procedimientos, según ampliaron la información.
Los nuevos procedimientos a cargo de los efectivos de la Sección de Investigaciones Antidrogas Clorinda, en dos domicilios en Puerto Madero.
En esos lugares los investigadores secuestraron 40 pastillas de éxtasis, una balanza de precisión, una máquina de envasado al vacío y documentación de interés para la causa.
¿Qué remedio es?: detuvieron a farmacéutico con 15 mil pastillas de éxtasis made in China
La detención del falso farmacéutico fue el 11 de diciembre en un trabajo en conjunto con la Aduana en el puesto fronterizo de la localidad formoseña de Clorinda.
En la requisa al Volkswagen Vento que manejaba el sospechoso, los pesquisas encontraron un paquete termosellado, color aluminio conteniendo a su vez, en una bolsa transparente tipo Ziploc una sustancia de color crema, no pudiendo, en un primer momento determinarse el tipo de mercadería que era, aclararon las fuentes.
Los investigadores le preguntaron al propietario sobre el paquete sospechoso e indicó que «se trataba de un componente para la producción de medicamentos».
Una vez efectuado el secuestro, se dio intervención al Juzgado Federal de Formosa, a cargo del magistrado Pablo Morán.
Seguidamente, los investigadores ordenaron la detención del farmacéutico y el análisis cromatográfico de la mercadería a través de peritos oficiales que confirmaron que la sustancia trasladada era metilendioximetanfetamina o MDMA, usualmente conocida como «éxtasis» o «molly».
Según explicaron voceros de la Aduana, se trata de una droga empatógena perteneciente a la familia de las anfetaminas sustituidas y su principal uso es recreativo ilegal, debido a sus efectos fisiológicos, pues actúa aumentando la actividad de los neurotransmisores en el cerebro y puede causar alucinaciones.
El pesaje total alcanzó los 1.110 gramos, equivalente a unas 14.800 pastillas que se comercializan alrededor de 15 dólares por unidad y que estuvo valuada a un valor del mercado en unos 70 millones de pesos.