Alta en el cielo. O mejor dicho en la tabla de posiciones. Esa es la gran premisa de la selección argentina para esta nueva doble fecha de las Eliminatorias Sudamericanas, la segunda en lo que va de este insólito 2020. Con Messi a la cabeza, el equipo conducido por Lionel Scaloni recibe esta noche a Paraguay en el primero de los dos nuevos exámenes que rendirá en los próximos días en busca de la ansiada clasificación a Qatar 2022 (el martes visitará a Perú en Lima), camino que comenzó de la mejor manera el mes pasado tras superar a Ecuador de local (1-0) y a Bolivia en el mismísimo estadio Hernando Siles (2-1).
Claro que aquella primera presentación los ecuatorianos casi ni cruzaron la mitad de la cancha de La Bombonera y días más tarde Argentina enfrentó a la peor selección boliviana de su historia. Pero ganó, incluso en ese nido de pájaros de La Paz donde eternamente le costó tanto jugar…si es que jugó a algo. Tanto en la cancha de Boca contra los de Gustavo Alfaro primero y frente a los vecinos del Altiplano después.
Algún que otro destello aislado de Messi, la cuota goleadora que tiene acostumbrada Lautaro Martínez, algo de la inteligencia de Leandro Paredes para moverse en el medio y el despliegue de Exequiel Palacios fueron quizá los puntos más altos de un equipo netamente en construcción, en “renovación”, como tanto pedían a gritos algunos sectores de la prensa.
Claro que esta vez el astro del Barsa volverá a estar acompañado de otro “viejito” como Ángel Di María, quien pataleó de lo lindo al enterarse de que no había sido convocado la primera vez. Fideo, Leo y Nicolás Otamendi, titular esta noche ante los guaraníes, son los tres “sobrevivientes” de la vieja escuela, esa signada por la desgracia de perder tres finales, una de un Mundial (Brasil 2014) y dos de Copa América en los años posteriores. Gracias por tanto Higuaín…
Pero eso es historia antigua y solamente Messi tiene su lugar asegurado. El resto debe que rendir examen todos los partidos: desde Armani bajo los tres palos hasta el Toro Martínez en la delantera. Es por eso que entre algunos que llegan al límite en lo físico, otro como Lucas Martínez Quarta que no podía salir de Italia (maldita pandemia) y alguna que otra variante que tiene en mente el entrenador, el equipo para recibir esta noche a Paraguay no está confirmado.
De momento, Scaloni tiene asegurados a seis de los once titulares: el Armani en el arco, Gonzalo Montiel como lateral derecho, Paredes y Rodrigo de Paul en el mediocampo, y Messi con Lucas Ocampos arriba. ¿Y el resto? Nicolás Tagliafico y Otamendi padecen distintas molestias al igual que ex el goleador de Racing. Todo podría cambiar según las evoluciones físicas y las decisiones tácticas como el interrogante entre Giovani Lo Celso, ausente en los primeros partidos; y Palacios, sin duda la gran figura del partido en La Paz.
Es más: hasta se especula con la entrada de Di María y Messi como “falso 9”, aunque esa es la menos probable de las variantes que tiene en mente el DT, quien cada vez que pudo insistió que a él le gusta que el 10 juegue con una clara referencia de área como Lautaro. Es por eso que el gran candidato (siempre y cuando no pueda jugar el hoy atacante de Inter de Italia) es Lucas Alario, quien llega afiladísimo tras meter su segundo doblete seguido en la Bundesliga.
¿Y Paraguay? El equipo que comanda Eduardo Berizzo, invicto tras empatar en casa con Perú (2-2) y superar a Venezuela de visitante (1-0), también sufrió algunas bajas importantes por lesión como la del arquero Roberto Fernández, el lateral izquierdo Blas Riveros y el volante Andrés Cubas, ex Boca y Talleres.
Según lo que probó el Toto antes de viajar a Buenos Aires, en la defensa jugarían cuatro habituales zagueros: Robert Rojas, de River, sería el lateral derecho y Junior Alonso, ex Boca, jugaría por izquierda; mientras que los centrales serán Gustavo Gómez, ex Lanús; y Fabián Balbuena.
En la mitad de cancha también habrá futbolistas con pasado en el fútbol argentino, ya que será nuevamente titular el formoseño Gastón Giménez, ex Godoy Cruz y Vélez; el actual futbolista de San Lorenzo, Ángel Romero; y otro con pasado granate como Miguel Almirón.
Claro que Argentina es el gran favorito ante los guaraníes. Por pasado, presente y futuro. Pero sobre todo por Messi, quien bastante más veterano y todo, de momento sigue siendo lo único que nos diferencia de un equipito más del montón. Ojalá que el rosarino esta noche tenga ganas y Argentina pueda mantenerse en lo más alto antes de que mañana le toque salir a la cancha a Brasil. Esos sí que juegan lindo.