Las denuncias crecen sobre el supuesto enriquecimiento ilícito de los secretarios de la presidenta Cristina Kirchner, hoy a través del decreto 242, publicado en el Boletín Oficial, el Gobierno oficializó la renuncia de Julio Daniel Álvarez, uno de los cuatro funcionarios imputados en la causa que lleva adelante el juez federal Caldea Bonadio.
La renuncia rige desde el 1 de febrero pasado. Álvarez es el segundo asistente personal de la Presidenta que se aleja de su cargo en menos de un mes.
Isidro Bounine y Héctor Daniel Muñoz involucrados también en la causa judicial, continúan en funciones.
Álvarez entró en el 2003 a trabajar en la Casa Rosada de la mano de Néstor Kirchner cuando fue Presidente. En ese momento, el secretario había declarado ser dueño de un patrimonio de 5.866 pesos. Pero, según su última declaración jurada, sus bienes crecieron hasta un valor de 298.406 pesos. El ahora ex asesor presidencial declaró tener dos terrenos en la ciudad santacruceña de El Calafate: en 2004, compró uno de 1.500 metros cuadrados por el que pagó 9.034 pesos. Y en 2006, compró otro de 2.250 metros cuadrados, por 13.500 pesos.
Los bajos valores declarados por esas tierras (a un promedio de 6 peso por metro cuadrado) llamaron la atención de los peritos que trabajan en la causa.
A pesar de los precios subvalorados, el incremento patrimonial que registró Álvarez en los últimos años fue fenomenal: 4.992%.
Los cuatro secretarios involucrados el la causa de supuesto enriquecimiento ilícito cobraban sueldos próximos a los $ 15.000.